Aldama afirma tener pruebas en un móvil incautado y pide al Supremo que lo analice

María Salgado
María Salgado REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

El empresario Víctor de Aldama, a su salida de la cárcel.
El empresario Víctor de Aldama, a su salida de la cárcel. SERGIO PEREZ / EFE

El juez rechaza volcar el contenido de este teléfono hasta tomarle declaración

06 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Víctor de Aldama se siente traicionado e hizo ayer una advertencia a «todos los que me han negado, como en la cena de Jesucristo». El presunto comisionista del caso Koldo aseguró este jueves en una entrevista en W Radio Colombia que tiene mensajes de todos los altos cargos del PSOE y el Gobierno a los que ha acusado de recibir mordidas —salvo del número tres de Ferraz, Santos Cerdán— en un teléfono móvil que le fue incautado por el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, que lo investiga por fraude en el impuesto de hidrocarburos. La defensa del empresario solicitó al juez del Tribunal Supremo Leopoldo López, que instruye la causa contra el exministro socialista José Luis Ábalos por la trama de las mascarillas, que vuelque este dispositivo y lo analice porque «contiene comunicaciones por la vía de Whatsapp, relevantes para la presente causa especial y que corroborarán muchos de los extremos relatados» por el imputado en su declaración voluntaria del pasado 21 de noviembre, que le permitió salir en libertad provisional de la cárcel de Soto del Real (Madrid) tras un pacto con la Fiscalía Anticorrupción. El magistrado rechazó esta petición en una providencia en la que descartó requerir «en este momento» el volcado del terminal, sin perjuicio de cambiar de parecer tras tomarle declaración el próximo 16 de diciembre, si entonces «lo considera relevante para los hechos que aquí se investigan».

«Contemos la verdad todos»

Aldama avisó de que en ese teléfono encriptado «hay información de toda la gente de la que he hablado. Si fuéramos sinceros, de todos los que he hablado, si no tienen miedo de nada que lleven sus chats conmigo y los ofrezcan a la prensa o Fiscalía». Durante esta entrevista radiofónica, lamentó que Ábalos y su exasesor, Koldo García, hayan contado «diez versiones diferentes» de los hechos y lo hayan metido «en follones». El empresario justificó sus graves acusaciones porque llegó un momento en el que se cansó «no solo de pagar sobornos, sino de que abusen» de su persona. «Contemos la verdad todos. Espero que cuando la UCO entregue mi terminal, se vean todos los wasaps de todos ellos», añadió, tras admitir que se siente «maltratado».

Sobre su presencia en la sede socialista la noche electoral del 10 de noviembre del 2019, indicó que entró en Ferraz «por el garaje, como las autoridades», aunque reconoció que no puede demostrarlo. Tampoco tiene pruebas «de un sobre» con pagos de comisiones a altos cargos ni de que representantes del Ejecutivo trataron de llegar a un pacto de no agresión con él sin éxito, una revelación que hizo en este directo.

Aldama, que no comparecerá el próximo lunes ante la comisión que investiga la compra de material sanitario en el Parlamento de Canarias al no serle notificada su citación, remitió al Supremo el pasado miércoles un escrito de 37 páginas con «alegaciones complementarias» a su declaración voluntaria, y que el alto tribunal ya incorporó a la causa. En sus anexos, consta un contrato de alquiler con opción a compra, fechado el 24 de abril de 2019, y firmado presumiblemente por Ábalos y él mismo, de un piso situado en el número 164 del Paseo de la Castellana, valorado en 1,9 millones, que el comisionista le iba a regalar al exministro a cambio de adjudicaciones de obra pública, según denunció.

Torres: «Es una falsedad vil»

El imputado también le habría facilitado «inmuebles para encuentros de diversa naturaleza» en Madrid, afirmó, al ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, quien negó estas acusaciones. «Es una rotunda mentira, una falsedad vil», se quejó y anunció que ampliará su demanda contra Aldama.

Puente revisará los contratos señalados por el comisionista

El ministro de Transportes, Óscar Puente, reconoció que no da verosimilitud a las acusaciones de Víctor de Aldama y dijo que las pruebas aportadas por este tienen «poco valor». Pese a ello, anunció que «revisará» los contratos de obra pública, que, según el comisionista, fueron preadjudicados por José Luis Ábalos. «Vamos a comprobar, vamos a ver ese listado, vamos a tratar de verificar los procedimientos y a ver si vemos algo extraño en ello», apuntó.