El ministro de Transformación Digital, Óscar López dice que se trataría de un « whiskygate»
15 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, definió este martes como un nuevo «Watergate» el presunto delito de revelación de secretos por el que el Tribunal Supremo ha citado a declarar como investigado al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz por la filtración de un correo del abogado del novio de la presidenta madrileña. Ayuso aseguró que esta situación representa un ataque deliberado contra ella, orquestado por el Gobierno para desacreditarla políticamente.
Afirmó que el auto del Tribunal Supremo es la confirmación de que se han producido «dinámicas delictivas» en el uso de las instituciones públicas.
«El Fiscal General del Estado y la cuadrilla de Fortuny deberían dimitir al ser un peligro para el Estado de Derecho y, del mismo modo, el presidente del Gobierno debería dejar su puesto al ser un peligro para España» sostuvo.
El caso Watergate fue un escándalo político de principios de la década de los 70 en Estados Unidos tras el robo de documentos en la sede del partido Demócrata, y el posterior intento de la administración del presidente republicano Richard Nixon de encubrir a los responsables.
El ministro de Transformación Digital, Óscar López respondió a Díaz Ayuso que «el único Watergate, de pacotilla, mezclado con whisky de marca, es decir, que es como un whiskygate», es el de Miguel Ángel Rodríguez.