La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica pide al Gobierno que retire el concurso para resignificar Cuelgamuros: «Es irresponsable»
ESPAÑA

Considera innecesario gastar 26 millones de euros, según detalla en una carta remitida a Pedro Sánchez
15 abr 2025 . Actualizado a las 11:37 h.La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica ha remitido una carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, donde le pide la retirada del concurso internacional de ideas recién convocado para resignificar el Valle de Cuelgamuros, al considerar que un proyecto de esta envergadura es «innecesario».
En la carta, enviada este martes, la asociación asegura que es «irresponsable» la intervención que el Gobierno prevé hacer en Cuelgamuros a través de este concurso, convocado el lunes, y tacha de «innecesario» el gasto de decenas de millones de euros.
El Gobierno destinará 26 millones de euros para la resignificación del Valle, a los que hay que sumar otros 4 millones que los ganadores del concurso recibirán en concepto de honorarios.
La gran novedad será la construcción de un centro de interpretación en la explanada de acceso a la basílica.
Sin embargo, para la asociación de memoria bastaría con instalar una exposición permanente que explique la historia y el significado de este monumento franquista, donde hasta el 2019 permaneció enterrado el dictador Francisco Franco y en el que sigue habiendo más de 33.000 cuerpos de víctimas de ambos bandos de la Guerra Civil.
Además, el presidente de la asociación, Emilio Silva, señala en una nota de prensa que no es «aceptable ni comprensible» que la Iglesia católica permanezca en el Valle y que haya sido autorizada por el Gobierno a participar en el proceso de resignificación, «cuando fue parte activa y beneficiaria de la represión que sufrieron millones de personas».
El concurso para resignificar Cuelgamuros está previsto en la ley de memoria democrática y llega tras un acuerdo entre el Gobierno y la Iglesia para dotar de un nuevo significado a este enclave, pero sin expulsar a los monjes benedictinos que residen allí y gestionan actualmente la abadía, la hospedería y la escolanía.