Pedro Sánchez: «Hay jueces haciendo política y políticos que tratan de hacer justicia»

Carlos Peralta
C. Peralta REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

RTVE | EUROPAPRESS

Tras un año sin conceder entrevistas, el presidente del Gobierno reitera en TVE que presentará las cuentas del Estado, aunque aclara que si no salen adelante no significará el fin de la legislatura. Los presupuestos, remarca, «son un instrumento, no un fin»

02 sep 2025 . Actualizado a las 11:49 h.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confía en la labor de casi todos los miembros del Poder Judicial. Hace un aparte con algunos jueces, en referencia a los instructores de los casos que afectan a su esposa, Begoña Gómez —citada a declarar el 11 de septiembre— y su hermano David Sánchez. «Hay jueces haciendo política y políticos que tratan de hacer justicia», destacó el jefe del Ejecutivo en su entrevista en la 1, su primera aparición en un medio en un año.

«Son casos palmarios de que no es así. Hay un problema de desempeño, de instrucción, de pena del telediario, que están pagando dos personas por ser familiares míos», destacó Sánchez. Insistió en su firme creencia de que ambos son inocentes para descartar cualquier otro escenario. Para él, no hay líneas rojas sobre la mesa. Tampoco en la causa judicial que cerca a los dos últimos secretarios de organización del PSOE en dejar el cargo: Santos Cerdán y José Luis Ábalos. «Hemos dado una respuesta muy contundente que otras organizaciones no han dado», aseguró el presidente del Gobierno, que eludió hablar de eventuales decisiones ante posibles avances del proceso judicial.

Al juez instructor del caso que afecta al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz —acusado de un presunto delito de revelación de secretos—, solo le queda decretar la apertura de juicio oral, después de recibir el aval del Supremo. Sánchez rechazó que, pese a ello, este tenga que dimitir. ¿Por qué? «Porque es inocente; porque creo en su inocencia», destacó el jefe del Ejecutivo, que se escudó en el voto particular de un magistrado del Supremo, que defendía la «falta de consistencia» en la fase de instrucción.

El futuro de la legislatura, para el presidente, dependerá más de la acción de Gobierno que de estos casos judiciales. «Sin duda alguna», remarcó. El avance del mandato, que llegará en noviembre a su ecuador, no estará en jaque por los Presupuestos Generales del Estado. Sánchez aseguró que su Gobierno los presentará, pero no serán definitorios para acudir a las urnas. «Son un instrumento, no un fin en sí mismo», destacó. La entrevistadora, Pepa Bueno, tiró de hemeroteca para recordarle que su posición era diferente en el 2017. Entonces era Mariano Rajoy el que estaba imposibilitado. Sánchez le recordó que esa es «su principal ley». «Lo que tiene que hacer es someterse a una cuestión de confianza», dijo.

El hoy presidente ve su caso diferente, al asegurar que los Presupuestos vigentes —del 2023, con Unidas Podemos y no Sumar como socio de coalición— le sirven para cumplir sus dos objetivos: gestionar los fondos europeos e impulsar la agenda social.

Para una eventual aprobación son claves los votos de Junts. Salvador Illa, presidente catalán, visita este martes al líder de este partido, Carles Puigdemont. El jefe del Ejecutivo ve el encuentro como un acierto del exministro, y lo enmarca en «la política de normalización» del Gobierno autonómico y no en una cita en clave presupuestaria y nacional.

Bueno fue incisiva al cuestionarle si estuvo o no invitado a la reunión de Trump con líderes europeos en la Casa Blanca. Sánchez finalmente respondió que no y negó tener un enfrentamiento con la Administración del líder republicano.

Sobre la gestión de los incendios, lanzó un dardo al PP, al mando de las comunidades más afectadas. «Lo que no funciona es la deslealtad institucional y los recortes», aseguró.

Cuestionado por la polarización política en España, Sánchez rechazó tener responsabilidad en ello. «La polarización es asimétrica. Yo no insulto», destacó el presidente, que instó al resto del espectro político a defender sus ideas «con un mínimo de respecto».