El viernes tuvo que evacuarlo una ambulancia
11 feb 2025 . Actualizado a las 04:46 h.José Ángel Ríos es un mariscador que ayer cumplió una semana de huelga de hambre. Y eso a pesar de que el pasado viernes tuvo que ser trasladado al hospital porque la falta de alimento comenzaba a hacer mella en su cuerpo: «Voy a seguir hasta el final», relataba ayer ante la sede del Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI) de la Seguridad Social en Ferrol.
Este trabajador del mar pide mantener la incapacidad permanente que le concedieron hace dos años. No reclama una invalidez absoluta, porque cree que está en situación de seguir trabajando, aunque no mariscando porque ya no tiene movilidad para ello. Tampoco puede trabajar en su propio barco, debido a que no supera los controles médicos necesarios para ello.
Ríos reclama que la administración le vuelva a reconocer una incapacidad por artrosis severa y la rotura de tendones, de la que, afirma, no ha experimentado mejoría ni tampoco se le han practicado pruebas que la acrediten para la modificación de su situación. «La huelga es dura, cada vez voy a peor, pero intento resistir lo que pueda para que se haga justicia, resistiré hasta que la palme aquí», aseguró tras una semana de protesta.