
El hijo mayor de la mujer asesinada en Cabanas hace diez años siente alivio tras la detención del presunto asesino, pero también incertidumbre sobre cómo acabará la investigación
19 oct 2023 . Actualizado a las 11:21 h.Adrián Fernández Abruñedo es el hijo mayor de Elisa Abruñedo, el mismo que lleva diez años peleando para que se esclarezca el crimen que conmocionó la pequeña parroquia de Lavandeira, en el concello coruñés de Cabanas. La Guardia Civil lo avisó el martes de que habían detenido a un sospechoso del asesinato: a Roger Serafín Rodríguez. A Adrián, este nombre no le dice nada. No lo conoce, explica por teléfono, y está casi seguro de que sus padres tampoco habían tenido relación alguna con este aficionado a la caza de 49 años y pelirrojo. La Guardia Civil buscaba a un hombre con el pelo de ese color, pues el asesino de Elisa dejó muestras de su ADN, que delataron esa característica.
Adrián reconoce que se siente «aliviado» tras la detención, pues, aunque hayan pasado diez años, «no me he rendido en ningún momento, sabía que tarde o temprano iba a caer», aunque todavía no es seguro que Roger Serafín Rodríguez sea el autor del crimen. Aliviado también porque se confirma, de momento, que el presunto asesino no es conocido y que no pertenece al entorno de Elisa, algo que «te quita un peso de encima». Se acaban también las «millones de teorías» que Adrián fraguó en su cabeza a lo largo de estos diez años: «Cuando iba por la calle y alguien me saludaba, pensaba que podría ser él, se lo decía a la policía, que lo descartaba».
Pero ese alivio se mezcla, precisamente, con la incertidumbre sobre cómo va a discurrir ahora la investigación y sobre el futuro del caso. «Si al final es el asesino, ¿qué va a pasar? ¿Irá dos años a la cárcel y saldrá a la calle por buena conducta?», se pregunta en voz alta. Lamenta que las leyes de este país sean, a su entender, tan laxas con los criminales, pese a que «la Guardia Civil se mata a trabajar».
Cuando el asesino de su madre deje de ser presunto y sea condenado por ello (este detenido u otro), Adrián Fernández desea «que se pudra en la cárcel, pero con todos los presos, no aislado en un módulo de seguridad». ¿Le gustaría encontrarse frente a frente con el presunto asesino de su madre? «Verlo frente a frente, mejor no, por su seguridad y porque soy padre de un bebé de seis meses».