Los okupas invaden de nuevo la mansión indiana de San Román, en Narón: «La policía no consiguió entrar, la puerta está atrancada»
NARÓN
Policía Local y Policía Nacional se acercaron alertadas por los vecinos de Xuvia pero no lograron acceder; el inmueble está gestionado ahora por una inmobiliaria y de la chimenea sale humo
22 ene 2024 . Actualizado a las 16:44 h.La ruina avanza cada día más en la casa de San Román. Una de las joyas de la arquitectura indiana en la ría de Ferrol vuelve a ser tomada por los okupas. La mansión de Xuvia (Narón) fue okupada ayer por al menos una pareja, según atestiguan los vecinos. «Sale humo por la chimenea, y los policías no consiguieron entrar porque los okupas atrancaron la puerta del edificio con una barra de hierro», indica el vecindario de Xuvia.
La casa de San Román se alzó hace 150 años, por el impulso del marino e hidrógrafo Claudio Montero Gay. Dentro se conservaban piezas únicas de cuando allí residía la familia San Román (descendiente de Claudio Montero), muchas fueron cedidas y otras saqueadas en los últimos años. Como pajareras de madera, un maniquí de un guerrero samurai, una réplica del Ko-i-Noor (el mayor diamante del mundo), una bañera de mármol negra hecha con un solo bloque de piedra serpentina de Moeche... Según confirma el Concello de Narón, este jueves los vecinos alertaron sobre la presencia de okupas. Hasta allí se desplazó al anochecer una patrulla de la Policía Local, pero las personas que habían tomado la casa «ni abrieron la puerta ni se identificaron».
Recalcan desde el Concello que «el procedimiento habitual en estos casos es avisar a la propiedad, que ahora está en manos de una inmobiliaria» para que conozca la existencia de una okupación. Los vecinos también fueron testigos de cómo «salía humo por la chimenea y los okupas se asomaban por la buhardilla». Ellos mismos avisaron tanto a la Policía Local como a la Policía Nacional, y ambos cuerpos se personaron con patrullas en la zona (carretera de Castilla). Pudieron acceder a la finca a través del portal que da a la calle, pero no al edificio que tenía la puerta atrancada.
Los vecinos presenciaron tras la marcha de los agentes que una pareja salía de la casa de San Román. Pero a estas horas, el Concello desconoce si continúa la okupación ya que los policías no consiguieron entrar en el inmueble.
Ya en Navidades, los vándalos forzaron tanto las puertas del muro en la carretera de Castilla como las principales de la mansión. «Unha casa histórica vive nun tremendo deterioro, reclamamos a titularidade pública e o uso veciñal», indicaba entonces Anxo Rial, desde la asociación Altea de Xuvia. Los cierres se cambiaron entonces para evitar nuevos robos. Se trata de una propiedad privada, en su día cedida temporalmente a la administración local a través de un acuerdo que ya expiró hace años.
Durante los últimos años, los ladrones hasta se han llevado el metal de su emblemático tejado. Tantos saqueos sufrió San Román que solo queda papel francés en las paredes. En su día, este emblema de la arquitectura indiana albergó incluso un cocodrilo disecado de Flipinas (islas en las que aquel pionero Montero Gay luchó contra los piratas). Ahora solo resisten los leones en piedra de la entrada, en una suerte de La caída de la casa Usher mientras reina la desolación.