
En la parroquia de Vilarrube, en el municipio de Valdoviño y en plena ruta a Santo André, se encuentra la histórica ermita, crisol de leyendas, en la que se veneran unas imágenes absolutamente singulares
16 ago 2025 . Actualizado a las 18:00 h.Al lugar, que es uno de esos mágicos enclaves de la Galicia do Norte en los que se abrazan la tierra y el cielo, le llaman Liñeiro, topónimo que viene a indicar que por allí, en algún momento del fondo de las edades, se cultivaba el lino. Y está en la parroquia de Vilarrube, en el término municipal de Valdoviño, ya casi llegando adonde —tras atravesar Porto do Cabo— comienza la Terra de Cedeira. En medio de una arboleda que debe de ser muy grata, sobre todo a determinadas horas de la madrugada, a las ánimas del Trasmundo, se encuentra la Capela da Fame, antaño uno de los hitos del Camino de Santo André de Teixido.

El interior del templo sobrecoge, en verdad, al visitante. Algo hay en él que nos habla de la eternidad constantemente. Atravesar sus puertas es como adentrarse en el inmenso misterio que nos rodea. Especialmente cuando uno se encuentra ante el imponente retablo pétreo que está en su cabecera. Un retablo, probablemente labrado en el siglo XVI, en el que se rinde tributo a la Inmaculada Concepción.

Desde otra ermita...
Dicen, quienes suelen visitar año tras año esta capilla, que este retablo procede ya de otra ermita diferente, perdida hace siglos. Una ermita que dicen que no estaba exactamente donde está hoy la Capela da Fame, aunque a uno —puestos a dejar volar la imaginación, que tantas veces es hermana de la melancolía— le parece que bien pudiera ser que sí. El caso, y permítasenos insistir en ello, es que la Capela da Fame, cuyo nombre al parecer procede —o eso sostiene otra de sus muchas leyendas— de lo hambrientos que los peregrinos solían llegar a tan difíciles parajes, subiendo y bajando las cuestas que hasta allí llevan, está en un lugar que merece la pena conocer. Y tal vez convenga pasar allí un par de horas, conversando con uno mismo. Sobre todo ahora. Cuando, poco a poco, se acerca el centenario de la histórica peregrinación a Teixido que llevaron a cabo Ramón Otero Pedrayo, Ben-Cho- Shey y Vicente Risco. La Capela da Fame guarda, para siempre, la memoria de cuantos romeros pasaron junto a ella.

De camino a Santo André
El lugar guarda la memoria de cuantos peregrinaron, en el pasado, a Teixido
Devoción a la Inmaculada
En el centro del retablo de piedra se encuentra una imagen de la Inmaculada Concepción.