
Cuando se implantó la prohibición, la cifra de sanciones llegó a sesenta
15 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Pese a que grandes carteles alertan sobre la prohibición de pisar las dunas de Corrubedo, el camino de huellas que atraviesa la gran montaña de arena, desde donde termina la pasarela de madera hasta la playa, evidencia que son muchos los que se saltan la norma a la torera. Según los datos facilitados por la Consellería de Medio Ambiente, desde enero se han interpuesto un total de 22 denuncias. Se trata de una cifra similar a la registrada por este mismo concepto durante los últimos años.
Tal y como indican los paneles instalados en el complejo dunar de Corrubedo, estos denunciados se exponen al pago de sanciones económicas que oscilan entre los seiscientos y los seis mil euros. Si bien es cierto que se trata de cuantías muy importantes, las numerosas huellas que, sobre todo en verano, adornan la mole de arena demuestran que no consiguen disuadir a los visitantes, por lo menos, no a todos.
Fue tras declararse la prohibición de caminar por encima de las dunas, en el año 2006, cuando más denuncias se tramitaron. Según los datos de Medio Ambiente, en el 2008 se abrieron sesenta expedientes. A partir de entonces, el número de requerimiento bajó y quedó estancado en torno a la veintena. Desde la consellería explicaron esta tendencia en el efecto disuasorio generado por la gran cantidad de sanciones impuestas durante la primera etapa de vigencia de la normativa.
Sin embargo, el rastro de huellas que corona la gran duna demuestra que ni las imponentes sanciones ni la necesidad de proteger un entorno que fue dañado y saqueado sin piedad durante años consiguen disuadir a todos aquellos que visitan el parque natural.