El objetivo de este programa, de casi 15 millones de euros, es que aumente el peso de las empresas emergentes en la economía gallega
19 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Se basan en la innovación, son empresas emergentes, tienen un alcance geográfico ambicioso y normalmente detrás están jóvenes emprendedores que han sabido encontrar un nuevo mercado. Son las start-ups, un modelo que crece en los últimos años y al que la Xunta de Galicia no está dispuesta a renunciar. Por eso, la reunión semanal del equipo de Alfonso Rueda evaluó hace tan solo unos días la nueva Axenda Start-ups Galicia 2022-2024 con una apuesta clara, reforzar un ecosistema que conjugue la iniciativa empresarial con la innovación. Y es que prácticamente ningún sector productivo puede renunciar ahora mismo a esta innovación, por lo que el Gobierno gallego quiere que esta agenda sea «un motor de reforzo da modernización e diversificación da economía de Galicia».
Este paquete de medidas suma casi quince millones de euros, 14,7 en concreto, con el fin de crear un centenar de empresas y acelerar 200 start-ups en los próximos dos años, mejorando así la capacidad competitiva de la comunidad gallega. La agenda favorece el crecimiento de las empresas de base tecnológica y fomenta la creación de riqueza y empleo. Las previsiones de este proyecto son poner en marcha 600 puestos de trabajo vinculados a las nuevas empresas, y facilitar una facturación agregada de estas compañías emergentes de 70 millones de euros en este período.
La Axenda se estructura en líneas diferentes, con doce medidas y 28 actuaciones que giran sobre dos ejes: uno, centrado de forma específica en las start-ups, y otro de medidas de promoción del ecosistema innovador. El primero de los ejes aglutina programas de apoyo a estas entidades de otros organismos y programas de la Xunta para crear un mapa completo de medidas incentivadoras. Entre ellas, la puesta en marcha de business factories. Son aceleradoras verticales en las que los emprendedores podrán encontrar apoyo y los medios necesarios para desarrollar sus ideas y llevarlas al mercado.
Estas aceleradoras se centran en sectores concretos, y la Xunta quiere poner en marcha algunas que respondan a las tendencias actuales para la transformación tecnológica del sector alimentario (foodtech), de la salud (healthtech), del campo de la biología (biotech), la logística o las cadenas de suministro. De hecho Galicia ya cuenta con un mapa de aceleradoras creado estos años en torno a la alimentación, la automoción, la aeronáutica, la salud, la biotecnología o incluso una incubadora de alta tecnología para la automoción que completa a la propia business factory de este sector.
Búsqueda de inversores
Otra de las novedades de esta agenda es la búsqueda de la inversión privada. El programa de la Xunta quiere captar inversores para potenciar la colaboración público-privada en las start-ups gallegas. Esto se hará a través del nuevo programa Coinviste con XesGalicia, atrayendo a socios con acreditada solvencia económica, con capacidad tractora y con una adecuada especialización en base tecnológica.
Mercado exterior
La llegada de estos inversores puede ayudar a la internacionalización de las compañías, clave en este tipo de empresas emergentes, pero a ello también contribuirá el programa Erasmus Start-up, cuyo objetivo es conectar emprendedores en el ámbito internacional a través de la participación de empresas emergentes gallegas en iniciativas que se llevan a cabo en otros países. El segundo eje de la agenda presentada por la Xunta pretende fomentar un ecosistema innovador en la comunidad gallega, mejorando por ejemplo las condiciones en el entorno femenino para facilitar que lleven a cabo sus proyectos y también en el ámbito rural, en este caso reduciendo las barreras frente al medio urbano. Respecto al impulso a iniciativas promovidas por mujeres, destaca una nueva línea enfocada a la captación de emprendedoras que desarrollen en Galicia proyectos centrados en retos tecnológicos y territoriales específicos.
Este modelo ha contribuido a crear 153 empresas
Lo que quiere la Xunta de Galicia con esta agenda es que la comunidad no se quede atrás en la innovación y que el tejido productivo sea más competitivo en relación a otros mercados. Se refuerza por lo tanto con estos programas una actividad que ya lleva siendo objetivo del Gobierno gallego en los últimos años. En concreto, en seis años se ha apoyado y acelerado a través de las distintas aceleradoras sectoriales a más de 320 empresas, contribuyendo a la creación de otras 153 compañías innovadoras.
Esto supone generar riqueza y empleo, en su mayoría de alta cualificación por la tipología de estas entidades. A lo largo de seis años se implementaron 900 nuevos puestos de trabajo. A ello hay que sumar el trabajo de XesGalicia, que suma actualmente más de 34 millones de euros de su patrimonio asociado a start-ups, con casi 80 entidades en cartera y más de doce millones de euros de fondos disponibles para llevar a cabo inversiones en esas compañías emergentes.
Hace poco más de un decenio casi ni se hablaba de ellas pero las aceleradoras son ahora una realidad en España. Hay cientos y muchas pugnan por atraer a los mejores emprendedores. Aunque su tamaño, sus inversores y los sectores a los que se dedican varían, la filosofía es la misma, acompañar a las start-ups con apoyo y mentorización, buscando el mejor modelo de negocio para cada proyecto innovador e incluso ayudando a encontrar fondos.