
El director de la academia presentó un recurso ante la Dirección General de Tráfico Un examinador de la Jefatura Provincial de Tráfico suspendió a un alumno de una autoescuela de Boiro por no saber manejar el aire acondicionado del vehículo. La actuación del ingeniero ha encontrado duras críticas entre los responsables de academias de conducción, pues opinan que se trata de una falta leve y no de un fallo eliminatorio. El director de la escuela boirense ha presentado un recurso a la Dirección General de Tráfico para que se dé por válida una prueba que, a su juicio, había sido impecable.
22 jul 2000 . Actualizado a las 07:00 h.Vicente Piñeiro ya se veía al volante del coche que había comprado hace un mes. Era el último día de exámenes antes de las vacaciones. Y su tercer intento para obtener el permiso de conducción B-1. Llevaba casi veinticinco minutos de prueba cuando el ingeniero le indicó que estacionase en batería: «Un aparcamento impecable», dice. Pero, entonces, el examinador le pide que «baixe un punto o sistema de aireación». Fue fatal: «Bloqueeime; nin siquera lle entendín o que me decía», explica el alumno. Piñeiro se puso nervioso y no encontró ni los mandos: «Supoño que, se o intentara, sabería facelo, porque está todo indicado, pero nese intre non fun capaz». Y suspendió. Excesivo El director de la autoescuela, que acompañaba al alumno, reprochó al examinador su actitud, pues creyó excesivo e injusto ese no apto por «desconocer los mandos del vehículo». Afirma que si el ingeniero se hubiese expresado en términos distintos, y no refiriéndose al climatizador como sistema de aireación, Vicente Piñeiro sabría actuar. Está tan convencido de que su alumno merecía el aprobado como de que prospere el recurso que ha presentado ante la Dirección General de Tráfico para que se revise el caso. De todas formas, no podrá ser hasta que termine el verano, por eso de las vacaciones. Tanto el muchacho como el director de la autoescuela están seguros de que actuó con alevosía, pues, al siguiente alumno que subió al coche para realizar la prueba, lo primero que le pidió el ingeniero fue que «bajase un punto el sistema de aireación». El monitor boirense se negó a que siguiese examinándolo. El vicepresidente de la Asociación Provincial de autoescuelas no estaba al tanto del caso, pero coincidió con el monitor boirense en que es «excesivo» suspender a un alumno por desconocer el funcionamiento del aire acondicionado. A su juicio, el fallo debería catalogarse como falta leve y no como eliminatorio: «Es cierto que no saber manejar los mandos esenciales del vehículo es un suspenso garantizado, pero el aire acondicionado no es uno de esos elementos fundamentales», sentencia Maceiras. Añade que el manejo del aire acondicionado es diferente en cada automóvil, por lo que no tiene sentido basar en ese aspecto el resultado de una prueba completa. El ingeniero que examinó al boirense declinó hablar del caso dado que «no estoy autorizado para comentar el reglamento interno». Tampoco quiso manifestarse el subjefe provincial de Tráfico, pues son «cuestiones que atañen a la jefa del Servicio de Autoescuelas», persona con la que este medio no contactó debido a que está de vacaciones.