La defensa de los marineros, entre ellos tres gallegos, negocia el regreso a sus hogares Ayer comparecieron ante un tribunal de Australia y se fijó la fecha del juicio para el 5 de octubre
19 mar 2004 . Actualizado a las 06:00 h.Los cinco tripulantes del pesquero uruguayo Viarsa I , sobre los que pesa un supuesto delito de pesca ilegal en zona económica exclusiva de Australia en agosto del año pasado, negaron ayer los cargos que se les imputan en su comparecencia ante un tribunal australiano. Entre los acusados figuran tres gallegos, José González Pérez, patrón de pesca, y Antonio García Pérez y Francisco Fernández Olveira, ambos oficiales del buque. Los otros dos inculpados son el capitán, el uruguayo Mario Ribot, y el marinero chileno Roberto Enrique Reyes. La comparecencia en la ciudad australiana de Perth fue muy escueta y los tripulantes únicamente se limitaron a rechazar los cargos. El magistrado, por su parte, les recordó precisamente las acusaciones a las que deberán hacer frente y fijó la fecha del juicio para el próximo 5 de octubre. En este sentido, el capitán del Viarsa y el gallego Antonio García tienen ante sí un escenario más preocupante pues la Justicia australiana les imputa cuatro infracciones relacionadas con la actividad pesquera ilegal, mientras que sobre el resto de tripulantes pesan dos cargos. Vuelta a casa La defensa de los marineros ha solicitado la posibilidad de que los cinco puedan regresar a sus hogares, toda vez que la celebración del juicio se demorará aún siete meses. Actualmente, se encuentran en libertad bajo fianza, pero no pueden salir de la región de Perth. Al margen del proceso judicial que se sigue contra los tripulantes, la Justicia australiana ha dejado pendiente la reclamación de la naviera propietaria del buque, Navalmar, que solicita la recuperación del barco y el valor de las capturas que llevaba en sus bodegas, 85 toneladas de merluza negra, cuyo coste podría superar el millón de euros. Este dinero quedará en depósito hasta que los tribunales decidan si existen pruebas efectivas que demuestran la actividad ilegal del pesquero.