Australia vigila ya el Índico con un buque dotado con ametralladoras

Manuel Blanco REDACCIÓN

GALICIA

AUSTRALIAN CUSTOMS

«Los piratas saldrán volando al escuchar nuestra respuesta», dice el ministro de Pesca Canberra asegura que ésta es su nueva arma para luchar contra los barcos que faenan ilegalmente

18 dic 2004 . Actualizado a las 06:00 h.

Australia ha decidido combatir la pesca ilegal con todas sus armas. Y lo va a hacer en el sentido más literal de la palabra. Hace unos días, comenzó a vigilar las aguas del Índico con una patrullera de última generación que está dotada con dos ametralladoras del calibre 0,50, similares a las que incorporan los tanques de guerra Leopard . El Oceanic Viking y su tripulación tienen encomendada la misión de disuadir a los piratas que entran en aguas australianas para capturar merluza negra. El detonante de tan controvertida decisión, la de vigilar sus aguas con buques armados, fue la persecución del Viarsa en agosto del año pasado. La patrullera australiana Southern Supporter recorrió 3.900 millas por aguas de la Antártida y el Atlántico sur hasta que logró interceptar, con la ayuda de Sudáfrica y el Reino Unido, al pesquero de capital gallego. Paradójicamente, el Gobierno australiano todavía no ha conseguido demostrar que el Viarsa faenó ilegalmente en sus aguas y hace apenas unas semanas, un magistrado de Perth anuló el juicio contra los cinco tripulantes del pesquero, entre ellos tres gallegos, por falta de un veredicto unánime. Segun fuentes relacionadas con el proceso, once de los doce miembros del jurado consideraron que no había pruebas para condenarlos y los cinco están ahora pendientes de un nuevo juicio. Así las cosas, Australia ha hecho de la lucha contra la piratería una de sus banderas y las declaraciones de sus portavoces son muy significativas. Hace sólo unos días el portal especializado Fish Information recogía unas afirmaciones en tono de amenaza del ministro de Pesca, Ian McDonald: «Esos piratas de merluza negra, que creen que las armas están de adorno, simplemente saldrán volando al escuchar nuestra respuesta». El propio McDonald y su homólogo en el departamento de Justicia, Chris Ellison, se mostraron muy duros en la presentación del Oceanic Viking en el puerto de Fremantle, en Perth, precisamente la misma dársena en la que se encuentra retenido el Viarsa . «Este buque -subrayó el titular de Pesca- representa un negocio. Estamos decididos a proteger nuestras aguas y no toleraremos que ninguna operación ilegal robe el pescado australiano». Lo cierto es que de la apuesta de Canberra por estrechar el cerco sobre los piratas habla a las claras la última incorporación que ha realizado el Gobierno australiano. Además de ir armado, el Oceanic Viking es un barco de 105 metros de eslora y 9.000 toneladas que está equipado, a mayores, con una nave de abordaje de alta velocidad. Falta de medios Esta lancha ultrarrápida podría convertirse en un arma decisiva si se repite una persecución como la del Viarsa , en la que las dificultades de Australia para abordar al palangrero de capital gallego por falta de los medios adecuados retrasaron durante días el desenlace del operativo. Tras aquel incidente, el Ejecutivo del país austral lanzó un plan de patrullaje armado que cuenta con una dotación de 70 millones de dólares y que ahora ha visto la luz definitivamente con la puesta en actividad del nuevo buque.