La supresión de 800 de los 1.481 cargos a dedo en la Xunta debe esperar al 2010

Serafín Lorenzo SANTIAGO

GALICIA

MIGUEL SOUTO

El bipartito renovó ya 860 de los 1.134 puestos de libre designación que dejó el Gobierno del PP En la actualidad, 1.265 personas ocupan de forma definitiva esas plazas discrecionales

18 jul 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

El Gobierno bipartito no podrá materializar en esta legislatura su compromiso para suprimir 800 de los 1.481 puestos de libre designación que existen en la actualidad en la Xunta. Esas plazas, ahora ocupadas por funcionarios nombrados a dedo, serán sacadas a concurso, aunque esa convocatoria no se realizará hasta el 2010, de acuerdo con el plazo que la Consellería de Presidencia estima necesario para abrir el proceso a la máxima participación posible. Por tanto, será el Gobierno que resulte elegido en las autonómicas del 2009 el que realice ese concurso. La revisión de la Lei da Función Pública 4/1988 aprobada el martes por el Parlamento, que es la decimosexta reforma desde que la norma entró en vigor hace 19 años, habilita el procedimiento para eliminar esos cargos discrecionales, ya que establece que para los jefes de servicio el régimen ordinario es el concurso, y limita la libre designación a subdirectores, secretarías de altos cargos y otros que se determinen a través de las relaciones de puestos de trabajo, que decide la Xunta. Este último punto centra en parte el rechazo del PP a la reforma legal, porque sostiene que el Gobierno se reserva la potestad para determinar qué puestos podrán ser cubiertos nominalmente. Recambio político Según datos facilitados por la Consellería de Presidencia, de esos 1.481 puestos de libre designación 1.265 están ocupados de forma definitiva en la actualidad, es decir, las personas que los ostentan no están en situación de comisión de servicio. En sus primeros dos años de gestión, el actual Gobierno ha nombrado 860 personas para cubrir puestos de libre designación que ya habían sido creados por el Gobierno del PP. De este modo, lo que ha hecho el bipartito hasta ahora es cesar a 860 cargos nombrados a dedo por el anterior Ejecutivo y suplirlos por funcionarios que también han sido elegidos discrecionalmente. Se trata de un simple proceso de relevo de personas, porque los cargos siguen ahí. De hecho, el conselleiro de Presidencia, José Luis Méndez Romeu, señaló el martes en el Parlamento que el Gobierno de Fraga dejó 1.134 puestos de libre designación. Dos años después, hay 1.481, ocupados por 1.265 personas.