Caballero trató de forzar una gran manifestación contra la Xunta

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

GALICIA

El alcalde intentó convencer a los sindicatos sanitarios, que se negaron

08 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Abel Caballero todavía guarda en la memoria aquella manifestación que secundaron unas 30.000 personas contra la fusión de las cajas, en febrero del año pasado. Él iba a la cabeza y los gritos contra la Xunta del PP le hicieron soñar con otros cuatro años en la alcaldía de Vigo. En las últimas semanas ha fabulado algo parecido: sacar a los vigueses a la calle contra Feijoo y, por extensión, contra su candidata a alcaldesa, Corina Porro. Ha intentado convencer a los sindicatos de que organizasen una manifestación contra la privatización del nuevo hospital de Vigo. La protesta iba a celebrarse el 12, solo diez días antes de las elecciones.

«Nos dijo que estaba dispuesto a poner los medios que hicieran falta», cuenta uno de los sindicalistas a los que les llegó la propuesta. «Pero nosotros pensamos: ??¿Y por qué no el 12 de junio, o de julio???. No queremos que se privatice el nuevo hospital, pero no queremos estar al servicio de cualquier partido», abunda otra fuente del sector. Así que decidieron no secundar la protesta.

Todo se había empezado a gestar hace dos meses, en una reunión entre el alcalde, los secretarios comarcales de la CIG, CC.?OO. y UGT y algún representante vecinal. Caballero explicó entonces que sus encuestas reflejaban el malestar ciudadano con la decisión del Gobierno de Feijoo de entregar a una empresa privada la construcción y parte de la gestión del nuevo hospital de Vigo. En ese encuentro, se mostró favorable a movilizaciones ciudadanas contra la Xunta. Después, gente afín al PSOE trató de convencer a los sindicatos de que hicieran el trabajo sucio, moviendo a su gente. Lo hicieron, por ejemplo, en la Plataforma para la Defensa de la Sanidad Pública, recientemente nombrada por el alcalde Viguesa Distinguida y con destacados simpatizantes al frente.

Pero el BNG, miembro también de esa plataforma, se negó. «Creyeron que la capitalizaría el PSOE», revelan fuentes sanitarias. La última reunión fue justo antes de Semana Santa. No hubo votaciones, pero quedó claro que los sindicatos no lo intentarían. Y el alcalde, aunque pensaba liderar la marcha, supo que no tenía capacidad para convocar una gran manifestación contra Feijoo.