La imputación al excomisario Maximino Losada está presuntamente relacionada con el golpe que en su momento dio la instructora de la operación en la brigada de extranjería de la comisaría lucense. De esta sección fueron detenidos su responsable, Evaristo Rodríguez Sánchez, y el subinspector Eduardo Castro Prado. Ambos quedaron libres tras declarar ante la jueza. Asimismo, fueron imputados agentes adscritos a la comisaría de Lugo.
Lo que la jueza y su equipo buscaron en la comisaría fueron documentos para tratar de saber si se produjeron legalizaciones irregulares o si algunas mujeres relacionadas con los clubes de José Manuel García Adán, uno de los cabecillas de la trama, recibieron algún trato especial. Adán, supuestamente, tenía buenos contactos no solo en la comisaría lucense, sino también en la Guardia Civil, o eso es, al menos, lo que creen los investigadores.