Los partidos hablan de «escándalo», «barra libre», «salto al vacío» y «política perversa»
02 ago 2011 . Actualizado a las 06:00 h.«Escándalo», «barra libre», «irresponsabilidad», «salto al vacío» o «política perversa y discriminatoria» son algunos de los calificativos que ayer se cruzaron PP, PSOE y BNG por el urbanismo de Barreiros. El debate está más vivo que nunca, pese al presunto intento de la Xunta por evitarlo, cuando no dio publicidad al acuerdo de retirar 21 de los contenciosos que presentó el anterior bipartito autonómico contra licencias de obras de Barreiros. Se podía esperar que el asunto se diluyese en la vorágine festiva de agosto; pero no ha sido así, y la confrontación se recrudeció ayer.
Ismael Rego (PSOE) dio una rueda de prensa para pedir la comparecencia urgente del conselleiro Agustín Hernández. «Voltou a lexislación á carta, presidida pola discrecionalidade», clamó Rego, porque para el PSOE, la actuación de la Xunta en Barreiros supone amparar y dar cobertura a ilegalidades, mientas que la retirada de los contenciosos abre la puerta a que los promotores soliciten con éxito indemnizaciones. En el fragor de la batalla Rego fue más allá al insinuar supuestas irregularidades del presidente Feijoo con el PXOM de Ourense.
La diputada del BNG Teresa Táboas denunció la política «ultraliberal» de la Xunta. De la retirada de los contenciosos afirmó que es un «salto no baleiro que nunca antes se dera en Galiza», con el que Feijoo se arrodilla ante los promotores. El BNG presentará iniciativas para que sean los constructores quienes sufraguen íntegramente los 14 millones que se dedicarán a consolidar los solares.
Ante semejante carga de artillería, la Xunta reaccionó. Agustín Hernández incidió en el «doble lenguaje» de PSOE y BNG, pues gobiernan en la Diputación de Lugo, organismo que aportará 1,2 millones para dotar de servicios a los solares de Barreiros. Dio a entender que la Xunta está entre la espada y la pared y garantizó que no se darán las licencias de primera ocupación hasta que los servicios urbanísticos estén concluidos.
El portavoz de Urbanismo del PP, Román González, le echó un capote: «O camiño que sinalan os socialistas levaría a un conflito xudicial impredecible no tempo e nas indemnizacións económicas que suporía».
«O que se busca en Barreiros é resolver un problema garantindo o interese xeral»
Agustín Hernández