El alcalde solo tenía aquel día en su agenda recibir al director de un colegio
28 feb 2014 . Actualizado a las 10:42 h.El 30 de mayo del 2013, cuando se celebró la junta de gobierno de Santiago en la que se aprobó pagar con dinero público la defensa legal del edil del PP Adrián Varela tras su imputación en la Pokémon, el alcalde, Ángel Currás, estaba en la ciudad y en el Ayuntamiento. En su agenda oficial de aquel día tan solo figura que a las 11 horas -la reunión del ejecutivo local fue a las 10- tuvo que recibir al director de un colegio. Ayer, preguntado por este asunto, se negó a hacer declaraciones y a aclarar qué motivó su ausencia pese a que la ley establece que las principales atribuciones de un regidor son presidir este órgano y el pleno.
La vicealcaldesa, Reyes Leis, tampoco asistió a la reunión que finalmente provocó la imputación de siete ediles del PP y que muy probablemente les obligará a sentarse en un banquillo por prevaricación. La mano derecha de Currás tiene justificación, ya que estaba en la inauguración del encuentro de emprendedores Getting Contacts, y entre sus atribuciones está la de Economía.
La cercanía en las fechas con un viaje oficial a Santander al que tres días después fueron Ángel Currás y Reyes Leis hizo pensar al BNG y el PSOE -e incluso a miembros del PP- que la ausencia de la junta de gobierno se debió a que estaban en Cantabria, pero no fue así. Ambos estaban en Santiago y, en el caso del regidor, incluso en el Concello.
¿Por qué no asistió entonces Currás a la junta de gobierno? Lo cierto es que el alcalde se ausentaba con cierta frecuencia de estas reuniones, pese a su vital importancia en la vida del Concello. Entre sus detractores en el PP santiagués y en la oposición se asegura que no acudía siempre que se fuese a aprobar un asunto espinoso porque no quería que su firma pudiese acarrearle más problemas legales. Ya está imputado por tráfico de influencias en la Pokémon y por prevaricación y acoso por la relegar al exsubjefe de la Policía Local. En marzo, abril y mayo del 2013 el regidor dejó de asistir a un 20 % de las juntas.
Las facturas de Vendex
Aprobar que el Concello pagase con dinero público el abogado al edil de Deportes, Adrián Varela, no era lo único comprometido en el orden del día de aquella junta, aunque sí ha sido este asunto el que ha provocado la imputación de todos los ediles que asistieron a la reunión. También se aprobó aquel día el reconocimiento de facturas por valor de 272.169 euros a Sermasa, la empresa del grupo Vendex investigada en Santiago por la adjudicación de una guardería.
Unas facturas como esas originaron un enfrentamiento entre la que era concejala de Educación, Rebeca Domínguez, y Currás. La edila se negó a firmarlas tras estallar el escándalo Pokémon y, como el regidor la presionaba para que lo hiciese, ella le retó a que las firmase él, algo que el alcalde tampoco quiso hacer.
Tras la imputación de los siete ediles que sí acudieron a aquella junta de gobierno, algunos de esos concejales se mostraron muy molestos por la ausencia de Currás y por el escaso apoyo público que les mostró. Ese malestar se tornó en reproche directo por parte de algún edil que le llamó la atención al regidor recordándole todas las juntas de gobierno a las no había asistido. A partir de esa protesta, el alcalde ha acudido con mucha más frecuencia.