La embajada en EE. UU. cree que la extradición de Makelele irá para largo

E. V. Pita VIGO / LA VOZ

GALICIA

«No se puede predecir el resultado», admite un diplomático en Washington

21 may 2014 . Actualizado a las 18:15 h.

La Embajada de España en Estados Unidos augura que la extradición del prófugo Jorge Luis Sosa, conocido en Galicia como Makelele, será un «proceso largo» e impredecible que requerirá más de un año de gestiones. La oficina consular en Washington formalizó la petición a las autoridades norteamericanas el 13 de enero, solo tres días después de que el Consejo de Ministros aprobase la medida. Desde entonces, la Administración de Obama guarda silencio sobre si entrega o no al fugitivo que reclama España. Sosa es ciudadano estadounidense por haber nacido en Nueva Jersey, pero es reclamado por España para cumplir 3 años y 9 meses de cárcel tras ser condenado por una conducción temeraria que se saldó con dos muertos en un accidente de tráfico en la calle de Jenaro de la Fuente, de Vigo, en enero del 2008.

«Es un proceso largo. Cuando el reclamado es extranjero tarda aproximadamente un año desde que lo inicia el Gobierno de EE. UU., pero en este caso no se puede predecir el tiempo de resolución ni el resultado», dijo ayer el consejero adjunto de la embajada, Gregorio Laso.

Mientras, el prófugo, de 27 años, continúa su carrera pugilística en Estados Unidos. A pesar de ocupar el puesto 66 de su categoría, sube al ring contra curtidos rivales. El pasado día 9 peleó por el título del peso welter en un casino de Dover (Delaware) ontra Ray Robinson, el séptimo mejor boxeador del país. George el Terrible Sosa perdió por k. o., el tercero en 21 combates oficiales, un récord que le ha granjeado fama con solo dos temporadas en América. Y el 15 de marzo, en Bayamon (Puerto Rico), Ed Paredes, the Lion, tumbó a Sosa, el segundo k. o. en su historial.

Pero la otra pelea del Terrible Sosa se libra en los despachos diplomáticos. Según explica Laso, la embajada de España en EE.UU. solicitó, «como es habitual», la extradición al Departamento de Estado de ese país. Luego, las autoridades de EE.UU. suelen iniciar un trámite a través de su Departamento de Justicia, la Fiscalía General, el estado y el juzgado que tengan jurisdicción en el lugar donde pudiera encontrarse Sosa. El púgil que escapó de Vigo para no entrar en la cárcel de A Lama va a entrenarse a diario a un gimnasio de Reading (Pensilvania). En el último año viajó a Maryland, Nueva Jersey, Texas, Puerto Rico, Delaware y la República Dominicana por combates. Todo apunta a que el estado de Pensilvania decidirá, en primer lugar, si concede la extradición.

De momento, la embajada no ha recibido ninguna información al respecto. Fuentes del Ministerio de Justicia confirman que «actualmente está pendiente de resolución por parte de EE. UU.».

«El proceso se va a demorar porque hay que tener en cuenta que la solicitud se refiere a un ciudadano estadounidense y no a un mero residente y que, además, él puede recurrir la decisión del tribunal del estado previa a la decisión del Gobierno», dice el adjunto consular Laso. La decisión final la adoptará el Gobierno de EE. UU. a propuesta del Departamento de Estado.

España pide la extradición para que Sosa cumpla una sentencia del penal número 1 de Vigo, del 18 de diciembre del 2009, confirmada por otra de apelación de 12 de mayo del 2010 y firme quince días después, en la que se le condena como responsable de dos delitos de homicidio imprudente, lesiones y conducción temeraria. Sosa huyó mientras esperaba el indulto, que fue denegado.