El abogado del maquinista aseguró ayer que la CIAF «no tiene credibilidad alguna, pues sigue las directrices del Ministerio de Fomento». Manuel Prieto cree que existe un interés por centrar la culpabilidad en Francisco José Garzón Amo para desviar la atención sobre las responsabilidades de Renfe y el ADIF.
Pero también ve puntos en el informe que benefician su estrategia de defensa, como las recomendaciones relativas a que «se tendría que haber señalizado y balizado» la curva de Angrois. «Ahí está la base de la imputación del ADIF», dijo, en alusión a «la falta de medidas de seguridad que paliaran los posibles errores humanos», informa Europa Press.
También beneficia sus tesis las observaciones sobre el ERTMS embarcado. Prieto recuerda que en el informe se admite que el tren se habría parado si el maquinista no hubiera reconocido la transición hacia el sistema ASFA. El abogado cree que el ERTMS embarcado se desconectó «para evitar retrasos».