Feijoo convoca a los populares a un comité ejecutivo para nombrar como número cuatro del partido a alguien que «no ha protagonizado portadas»
10 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Era junio, muy a comienzos, y Paula Prado, salpicada por la operación Pokémon e incapaz de comparecer ante la prensa sin ser para otra cosa que hablar de lo suyo, tiró la toalla, dimitió como portavoz del Partido Popular de Galicia. Avanzó por aquel entonces Feijoo que la búsqueda del recambio iba a tomársela «con tranquilidade». Y así lo ha hecho, como hacía las cosas Arsenio, como las hace Del Bosque: casi parsimonioso. Porque cuando la vacante quede al fin cubierta, en una circunstancia inédita, habrán transcurrido más de cien días de vacío en el organigrama de los conservadores, 103 exactamente. La fumata blanca, a principios de la próxima semana.
A estas alturas, sobre el aguardado relevo, el presidente del PPdeG ha decidido el cuándo, el cómo y parte del quién; o sea, las formas de la designación y el perfil del sustituto sí, pero no la identidad de este. Despachar esas cuestiones tampoco le ha resultado sencillo, pues hasta la fecha no existían precedentes de elección de un portavoz de los populares fuera del marco de un congreso: al primero, Antonio Rodríguez Miranda, lo escogió Feijoo en el decimocuarto cónclave de los de la gaviota, celebrado en A Coruña en mayo del 2009; y a la segunda, Paula Prado, en el decimoquinto, que tuvo lugar en Lugo en enero del 2013. Al no tratarse de un cargo estatutario, además, las normas de la casa ni siquiera determinan de qué manera se debe proceder para tapar un hueco de esta clase, imprevisto.
De modo que el de Os Peares podría haber señalado a solas al número cuatro de su formación y luego comunicárselo a los suyos, pero no. Tras discutir el tema con su mano derecha, Alfonso Rueda, ha optado por convocar en Santiago, para el lunes por la tarde, un comité ejecutivo del partido y formalizar el nombramiento en ese contexto. Algo antes, no obstante, consultará su preferencia para el puesto con los barones provinciales: el de Ourense, José Manuel Baltar; el de A Coruña, Carlos Negreira; el de Lugo, José Manuel Barreiro; y el de Pontevedra, Rafael Louzán.
En secreto, Rueda y Feijoo ya han valorado la idoneidad de «varios» aspirantes a la plaza, si bien aún no se han decantado por ninguno. O al menos eso cuentan. La lista la han elaborado sin condicionantes de sexo ni territoriales, un clásico marca de la casa. Y coinciden en las características de todos los ahí referidos que saben cómo funcionan al menos un par de instituciones y el partido, aunque no pertenecen a la llamada primera línea del PPdeG, un corsé en el que entraría, entre otros, la diputada autonómica Marta Rodríguez Arias.
«El elegido no ha protagonizado portadas. No será un absoluto desconocido, pero esto supondrá un salto enorme en su carrera política», añade una fuente conocedora del proceso. Con las municipales a las puertas, dos reformas electorales en el horno y el temporal anticorrupción que no amaina, deberes no le faltarán.