Darío Villanueva Prieto nació en Vilalba el 5 de junio de 1950 bajo el signo de Géminis y precisamente la dualidad ha marcado su carrera
25 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Darío Villanueva Prieto nació en Vilalba el 5 de junio de 1950 bajo el signo de Géminis y precisamente la dualidad ha marcado su carrera: por un lado, el trabajo investigador, horas de estudio y reflexión que se han concretado en artículos, libros y conferencias; por otro, la gestión institucional y, como le gusta añadir, la educativa: catedrático, decano, rector, secretario y, ahora, director de la Real Academia Española. No obstante, una faceta no se entiende sin la otra, ya que ambas se complementan y retroalimentan: el gestor no ha perdido la sensibilidad del erudito literario, y el investigador y docente conoce bien el marco institucional en el que se desarrolla su tarea.
Es la faceta pública por la que lógicamente se le conoce más. En Galicia se recuerdan sus ocho años como rector de la Universidade de Santiago, una institución que entonces, en la segunda mitad de los noventa, sumaba 45.000 alumnos. Allí amasó una experiencia que, sumada a su paso previo por el decanato de Filoloxía, le ha valido para desempeñarse como secretario de la Real Academia Española, donde ocupa el sillón D. Si su paso por el rectorado compostelano coincidió con el quinto centenario de la institución, en la Academia hubo de ocuparse de la celebración de los trescientos años de la entidad, que dirige desde el pasado diciembre. Villanueva, que en la clásica división apocalíptico/integrado se ve más como lo segundo, es la persona idónea para asumir de la mano de la tecnología los retos del siglo XXI.
Iluminar el genio creador
Pero de forma pareja a esta faceta Darío Villanueva nunca ha dejado de lado su vocación docente e investigadora. Como buen comparatista huye de los dogmatismos y sus libros, de El polen de las ideas al reciente Imágenes de ciudad, buscan iluminar el genio creador sin distinción. Pardo Bazán, Cunqueiro, Ferlosio, Valle-Inclán o Dieste son algunos de los autores a los que ha dedicado estudios. También dirigió la más amplia historia de la literatura gallega, en cinco volúmenes del Proxecto Galicia, y pocos olvidan su análisis DAFO (debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades) del sistema literario gallego en un encuentro de la Fundación Casares. Como profesor ha visitado 30 países, donde, como le gusta decir, siempre se ha encontrado un gallego.