La policía pide a las lucenses que no salgan solas de noche ante la amenaza del violador

La Voz LUGO / LA VOZ

GALICIA

Alberto López

La investigación para dar con el autor de las agresiones sexuales sigue abierta

06 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Las dos agresiones sexuales -una de ellas, una violación consumada- denunciadas en Lugo en las últimas semanas, en un mismo bloque de tres edificios de viviendas de Estrada da Granxa, mantiene alerta a la policía. Además de confirmar que están buscando nuevas pistas para localizar al autor de estos dos casos de violencia machista, que en uno de ellos arrastró a la víctima al garaje y en el otro, a un cuarto de contadores, fuentes de la comisaría recomendaron una serie de precauciones para las mujeres en sus salidas nocturnas.

Entre los consejos difundidos por la policía lucense figura que no regresen solas a casa desde que anochece; que eviten calles oscuras y poco transitadas y que no entren en portales y ascensores con varones desconocidos.

Las recomendaciones las ampliaron a las comunidades de vecinos, a las que piden que no abran el portal a personas que no se identifiquen convenientemente. También aconsejan a las mujeres que si encuentran a alguien sospechoso en el portal que llamen al piso al que van y que pidan que acuda alguien a buscarlas. Las mismas fuentes sugieren el uso de taxis en lugar de caminar de noche en solitario.

Sin retrato robot

Las mismas fuentes apuntaron que no existe, al menos de momento, un retrato robot del agresor sexual que estén distribuyendo por la zona con la finalidad de recabar más pistas para tratar de localizarlo.

Ambas víctimas coincidieron en que se trata de un hombre de unos 30 años, de pelo rubio, alto y fuerte y que lleva un pirsin. Al parecer, las dos mujeres no pudieron verle la cara porque la cubría con una braga de las que habitualmente se colocan en el cuello.

Los vecinos de los tres edificios, que conforman una misma comunidad y que comparten el garaje, han adoptado ya una serie de precauciones, desde el mismo momento en el que tuvieron noticias del primer caso, el de una estudiante a la que violó en el cuarto de contadores. Parece ser que la arrastró hasta allí a finales del pasado mes de septiembre. La chica regresaba a casa sobre las cuatro de la mañana. Fue abordada en el ascensor.

Algunas fuentes hablan de que pudieron existir otros dos intentos frustrados de asalto a otras dos vecinas del edificio. Estas detectaron la presencia de un extraño de madrugada en la zona de los ascensores y evitaron coincidir con él a solas. Se desconoce, sin embargo, si la descripción física coincide con la aportada por las dos víctimas en la declaración realizada ante la policía. 

Puede actuar en otras zonas

El agresor, después del revuelo que se armó al trascender públicamente la violación consumada y la agresión sexual de otra mujer que regresaba de una cena de empresa, es probable que haya abandonado la zona. No se descarta que pueda intentarlo nuevamente en otros lugares, con menos vigilancia de las fuerzas de seguridad, de ahí los consejos difundidos por la policía.