La denuncia por intento de agresión de la joven en Boiro fue crucial para acelerar las dos detenciones

GALICIA

CARMELA QUEIJEIRO

El testimonio de la chica fue el argumento que se esperaba para reactivar el caso

30 dic 2017 . Actualizado a las 10:16 h.

Existe una máxima en la Guardia Civil que dice que cuando hay mucho movimiento por una investigación, la mejor forma de saber si está a punto de explotar es cuantificar cuántos mandos hay a plena actividad. Entre los más de 35 agentes de la UCO desplazados esta semana a Galicia había unos cuantos responsables del cuerpo, lo que sirvió de termómetro para calibrar lo que se cocía y estaba por venir. Los investigadores del caso Diana Quer siempre reconocieron que su trabajo podía llegar a buen puerto si alguno de los sospechosos cometía un desliz. Parece que ese lapsus sí se dio, y de la forma más escandalosa, si se confirma que la misma persona que habría cometido el intento de agresión a una joven de Boiro, el día 25, es José Enrique Abuín Gey, Chicle, el acusado formalmente de la desaparición de la joven. Lo que sí está confirmado es que esa denuncia aceleró toda la investigación e hizo trasladarse de urgencia a semejante batallón de integrantes de la UCO.

De inicio, fue necesario mantener la serenidad para no dejarse llevar por las pruebas incriminatorias acumuladas. Pero el testimonio de la joven denunciante de Boiro, a la que se habría intentado meter a la fuerza en un turismo utilizando un arma blanca, fue el argumento que se esperaba para reactivar el caso. Parece ser que otros dos vecinos de Boiro, que pasaban por el lugar de los hechos en ese momento, también se habrían lanzado sobre el turismo para evitar la presunta agresión, situación que reforzaría el caso con dos nuevos testimonios. Lo que resulta evidente es que todos estos argumentos policiales fueron vistos con buenos ojos por el juez instructor, que autorizó los registros y las detenciones hechas ayer.