Fabien azota Galicia superando los 183 kilómetros por hora

la voz REDACCIÓN

GALICIA

Miguel Villar

La comunidad sufre una sucesión de incidencias, más de medio millar, y medio centenar de vuelos afectados. Hay además 78.000 gallegos sin luz. La situación irá remitiendo en tierra a lo largo de la mañana; en el mar seguirá siendo muy complicada, con olas que pueden alcanzar los 14 metros.

22 dic 2019 . Actualizado a las 07:43 h.

Después de los estragos producidos entre el miércoles y el viernes por la borrasca Elsa, toda la Galicia estuvo en alerta roja el sábado por fuertes rachas de viento en el mar y peligro de oleaje en todo el litoral; y el aviso era naranja en tierra. Fabien se dejó notar desde primeras horas del sábado. A las once de la mañana en Punta Candieira, en Cedeira, se superaron los 165 kilómetros por hora, según los datos de MeteoGalicia. Pero por la tarde se superó ese registro: en Viveiro, en Penedo do Galo, los vientos superaron los 183 km/h poco después de las 18.00 horas.

La situación irá mejorando esta mañana, y a lo largo de esta mañana se irá recuperando la normalidad de las condiciones  meteorológicas; pero la alerta amarilla por viento permanecerá activa en toda la comunidad entre las 9.00 y las 15.00 horas. Poco a poco, la situación irá remitiendo en tierra; en el mar seguirá siendo muy complicada, con olas que pueden alcanzar los 14 metros.

El fuerte viento provocó los principales problemas de la jornada de ayer. Se registraron algunos desprendimientos de fachadas (por ejemplo, una en la calle Rosalía de Castro, en A Coruña), y se suspendieron todas las actividades de fútbol al aire libre. También se decidió, caso a caso, anular partidos o competiciones en pabellones cubiertos.

Unos 78.000 hogares gallegos sufrieron cortes de luz, según información de Naturgy, principal suministrador. Se trata de un considerable aumento: eran 27.000 los afectados cuando empezó la influencia de Fabien sobre la comunidad. Las áreas más afectadas son A Coruña, en concreto el entorno de Pontedeume, y las zonas de Chantada y Sober, en Lugo. La distribuidora movilizó a cerca de 600 personas, entre brigadas, operadores de red y de la plataforma telefónica. El despliegue incluye más de 170 vehículos y 45 camiones, además de 130 grupos electrógenos con el fin de agilizar la reposición del suministro eléctrico en los casos en que fueran necesarios. Se reforzaron los equipos y la plataforma telefónica para atender las incidencias. Por provincias, hay 22.500 afectados en A Coruña, 18.000 en Lugo, 27.000 en Ourense y 10.500 en Pontevedra. La mayor parte de estas incidencias están ocasionadas por la caída de árboles, ramas y cortezas sobre las líneas por el fuerte viento. 

Caos aéreo

En los aeropuertos se produjeron desvíos y cancelaciones, principalmente remitidos a Oporto, pero también directamente a Madrid o a León. Hay medio centenar de vuelos afectados, entre cancelaciones y desvíos. Una de las cancelaciones afectó al Celta, que iba a partir de Lavacolla a Valencia. En Santiago, entre los trayectos desviados o retrasados estaban los que habían salido de Palma de Mallorca, Zúrich, Tenerife Norte, Alicante, Ginebra y Barcelona; y otro de Mallorca, Madrid, Lanzarote, Basilea y Gran Canaria demorados. Desde las cuatro de la tarde no aterriza ninguno, aunque sí están saliendo unos pocos. Solo en este aeródromo hubo una treintena de casos. En Alvedro ha habido seis cancelaciones y tres vuelos desviados.  

También se vio afectada la circulación ferroviaria durante el sábado. Los trenes entre Vigo y A Coruña acumularon retrasos de más de dos horas. En la estación de la ciudad herculina se suspendió además el viaje de un tren que debería haber salido a las 21 horas.

Durante el día se sucedieron las caídas de árboles, algunos arrancados por la fuerza del viento. Asimismo, la ciclogénesis explosiva también afectó a una de las principales autovías gallegas. La A-8, que une Galicia con el País Vasco, estuvo cortada en Mondoñedo a la altura de Alto do Fiouco, entre los kilómetros 536 y 552 para todos los vehículos excepto turismos.

Por la tarde registró un corte temporal en la vía de tren de Monforte a A Coruña por la caída de dos árboles. El incidente tuvo lugar en el barrio de Mazoi, cerca de la terminal de carga de Lugo. En un primer momento fue avisada la Policía Local, que a su vez contactó con los bomberos. No obstante, el ADIF se encargó de la situación y se ocupó finalmente de la retirada. 

En el interior de Pontevedra también notaron el impacto del viento. En A Estrada hubo que cortar al tráfico el centro neurálgico, la Plaza de Galicia, por desprendimientos en la cubierta de un edificio. La piscina climatizada de la localidad tuvo que ser desalojada y cerrada al caer unas planchas de la cubierta. En la Academia Galega de Seguridade Pública también se desprendieron partes de la cubierta, en todos los casos sin causar daños personales. En Arousa, se ha derrumbado una casa deshabitada en Valga y se desprendió una cornisa en Vilagarcía. 

El periodo de mayor peligro en Galicia se concentró entre las 16.00 horas y las 20.00 horas de la tarde, han confirmado fuentes de Meteogalicia. 

Aunque Fabien es principalmente un temporal de viento, lo cierto es que en algunas zonas de Galicia siguen recogiendo abundante agua. En Manzaneda se registraron 93,4 litros por metros cuadrado.

En el mar, A Costa da Morte, la zona Coruña Noroeste, Litoral A Coruña, Litoral Pontevedra y A Mariña Luguesa sufrieron fuertes vientos y oleaje de forma más persistente desde las 15.00 horas. Se prevén olas por encima de hasta 14 metros esta misma noche.  

En Ourense, mientras, sigue inquietando la subida del río Miño a su paso por la ciudad. Y también en Tui y aunque la jornada de hoy no trae cantidad de lluvia, siguen varias zonas inundadas en la comunidad, sobre todo en la comarca de A Limia. 

Un talud se desplomó en las últimas horas en la Rúa Fonte da Balsa, en Culleredo, provocando el semienterramiento de un vehículo en el que vive una pareja desahuciada. «A ella tuvieron que evacuarla porque tiene problemas de salud», explicó una vecina.

A estas incidencias hay que sumar un arranque de sábado trágico en las carreteras gallegas, con dos muertos, uno en Esgos (Ourense), y otro en Ortigueira (A Coruña). 

Fuera de Galicia, ha muerto una mujer en Madrid a consecuencia de las heridas que le produjo la caída de cascotes. Y por el viento también se ha tenido que cerrar la popular administración de lotería Doña Manolita

Alerta desde una protectora

La protectora de animales Valodouro Alfoz vio como el viento se llevaba su refugio. Durante la tarde del sábado pidieron ayuda para que voluntarios acogieran a los animales en sus domicilios.