Siete de las diez mayores ciudades de España dicen no a ceder sus ahorros al Estado, como pactaron Hacienda y FEMP

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y el presidente de la FEMP, Abel Caballero
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y el presidente de la FEMP, Abel Caballero

El PP pide que las negociaciones para modificar ese documento en el Congreso excluyan a Abel Caballero

17 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El acuerdo aprobado entre el Ministerio de Hacienda y la FEMP (con el voto de calidad de su presidente, el alcalde de Vigo, Abel Caballero) para que los municipios cedan sus ahorros al Estado a cambio de que se los devuelva en 10 años, sigue recogiendo negativas que dejan más aislado al PSOE en su intención de aprobarlo en el Congreso. Los alcaldes de siete de las diez mayores ciudades de España ya han dado su no a ese acuerdo; es decir, no entregarán sus ahorros al Tesoro, lo que desinfla las expectativas del ministerio que poder llegar a disponer de entre 14.000 y 15.000 millones de euros en ahorros acumulados de los ayuntamientos. Una forma de ganar liquidez inmediata para el Estado en estos tiempos de crisis.

El decreto que aún tiene que validar el Congreso -y que ahora mismo no cuenta con apoyos suficientes- lo rechazan Madrid, Barcelona, Valencia (las tres ciudades más pobladas y con mayor presupuesto), Zaragoza, Málaga, Murcia y Bilbao; son urbes todas gobernadas por el PP (en solitario o en alianza con Cs), por alguna marca afín a Podemos (Compromís o Barcelona en Comú) y por el PNV. Suman unos ocho millones de ciudadanos. Entre las diez mayores urbes de España, solo Sevilla, Palma de Mallorca y Las Palmas, todas bajo mando del PSOE, se han mostrado partidarios de esa cesión que defienden Hacienda y parte de la FEMP.

El rechazo se extiende a todos los partidos de la Cámara, con la única incógnita de Unidos Podemos, cuyos regidores (incluyendo los de IU) se abstuvieron en la votación de la FEMP. Sin embargo, la negativa de Ada Colau puede pesar en el voto. Entre los que estos días han anunciado abiertamente que votarán no está el BNG, con una treintena de alcaldes de Galicia, y el Partido Regionalista Cántabro. También alcaldes de Bildu, de ERC y del PDECat. Y hay algunos socialistas que en público empiezan a mostrar su descontento con ese acuerdo, caso de los regidores de San Sebastián de los Reyes o de Denia.

El alcalde de Córdoba, José María Bellido (PP), reclamó ayer que el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y alcalde de Vigo, Abel Caballero (PSOE), no lidere las negociaciones del municipalismo con el Gobierno sobre el superávit municipal. Bellido, vicepresidente de la Comisión de Haciendas y Financiación Local de la FEMP, aseguró que es preciso una «negociación más plural y más abierta con todo el municipalismo» sobre ese decreto cuya aprobación en el Congreso está en el aire por el rechazo generalizado de todos los partidos, salvo el PSOE. El documento que tendrá que buscar el apoyo parlamentario, «no puede negociarse solamente a través del presidente de la FEMP, dejando al margen al resto de representantes de los grupos y las distintas fuerzas políticas, la negociación tenemos que hacerla todos».

El caso gallego

Por ahora, solo los municipios gobernados por el PP en Galicia, alrededor de 140, han avanzado públicamente que no suscribirán esa cesión de sus fondos (es voluntaria). No se descarta que los del BNG sigan los mismos pasos, aunque han evitado confirmarlo, fiándolo todo a que antes se tumbe ese acuerdo en el Congreso, y en su lugar se vaya a una derogación de la llamada ley Montoro, el origen de este problema. Es una norma del 2012 que impide a los ayuntamientos gastar su superávit en nada que no sea reducir deuda, lo que ha llevado a generar millones inmovilizados. Solo los concellos con mayoría absoluta del PSdeG tienen segura su adhesión.

LAS DOS POSTURAS