El maquinista del Alvia y el exdirector de seguridad del ADIF, al banquillo

José Manuel Pan
José Manuel Pan REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Accidente del Alvia en la curva de Angrois, el 24 de julio de 2013.
Accidente del Alvia en la curva de Angrois, el 24 de julio de 2013. XOÁN A. SOLER

El juez convoca juicio oral contra los dos únicos acusados por el accidente de Angrois. La Fiscalía pide cuatro años de cárcel para cada uno por 80 delitos de homicidio por imprudencia

22 jul 2021 . Actualizado a las 00:17 h.

El magistrado Andrés Lago Louro, juez instructor de la causa por el descarrilamiento del Alvia en la curva de Angrois el 24 de julio del 2013, ordenó ayer la apertura de juicio oral contra el maquinista del tren, Francisco José Garzón, y contra el exdirector de seguridad del ADIF, Andrés Cortabitarte. De esta forma, el juez da por formuladas las acusaciones contra ambos imputados como supuestos autores de 80 delitos de homicidio por imprudencia grave profesional, de otros 145 de lesiones por el mismo motivo y por un delito de daños. En un auto dictado este miércoles, el juez instructor recuerda que la Fiscalía solicita cuatro años de cárcel para cada uno de los acusados y pide además que el maquinista sea inhabilitado para su profesión durante el tiempo de la condena. Para el exdirectivo del ADIF también pide la inhabilitación, durante el mismo período de tiempo, para el ejercicio de cualquier profesión que implique gestión, seguridad o responsabilidad en infraestructuras ferroviarias.

Ambos tendrán que sentarse en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 2 de Santiago, que dirige la magistrada Elena Fernández Currás. Lo más probable es que el juicio comience en el primer trimestre del 2022, como avanzó el presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, José María Gómez y Díaz-Castroverde, y que se celebre en el edificio del monte Gaiás. De todas formas, aún es pronto para adelantar una fecha concreta ya que a partir de ahora las defensas de los dos investigados tendrán que elaborar sus escritos en respuesta a cada una de las acusaciones, lo que puede alterar las previsiones iniciales.

A los dos únicos acusados el magistrado les requiere la presentación de una fianza de más de 57 millones de euros, de los que tendrán que responder las aseguradoras como responsables civiles directas, o las entidades públicas Renfe Operadora y ADIF, como responsables subsidiarias. El objetivo de esa fianza es asegurar las responsabilidades económicas que se pudieran imponer en el caso de que se dicte una sentencia condenatoria. En el auto, el juez Lago Louro advierte a los imputados de que si no prestan esa fianza «se les embargarán bienes en cantidad suficiente para asegurar la suma señalada». Una vez notificado el auto, los acusados y los responsables civiles disponen de un plazo de tres días para comparecer en la causa con abogado y procurador, que en este caso consistirá en la ratificación de los actuales letrados.

Eso es lo que sucederá, al menos, en el caso del maquinista que descarriló el Alvia, como confirmó ayer su abogado, Manuel Prieto. El defensor Garzón ironizó con el momento elegido por el juez instructor para dictar el auto de apertura de juicio. «No sé si el juez instructor tiene obsesión por estas fechas, justo el momento en el que las víctimas están preparando los actos recordatorios de aquel día». Prieto dice que no le parece «el momento más adecuado, porque después de ocho años de instrucción y de varios meses con la instrucción cerrada, podría haber dictado el auto antes o después de estas fechas».

El maquinista, fuera de Galicia

Sobre el contenido del auto, el abogado del maquinista sostiene que no hay nada nuevo, que es una recopilación de todos los escritos de acusación presentados contra su defendido y contra el exdirector de seguridad del ADIF. El abogado asegura que aún no ha hablado del auto con su cliente. De hecho, afirma que en estas fechas no suelen tener contacto porque el maquinista Garzón acostumbra a marcharse de Galicia para evitar revivir la tragedia. «No son buenas fechas para hablar con él», asegura el letrado.

El pasado mes de abril, la Audiencia de A Coruña desestimó la petición de sobreseimiento planteada por la defensa del maquinista y confirmó el cierre de la instrucción de la causa. El tribunal recordaba entonces que Garzón «infringió indiciariamente el deber de cuidado» de circular a la velocidad que tenía establecida al llegar a la curva de la tragedia. Ese incumplimiento, añadía la Audiencia «provocó el descarrilamiento del tren al no respetar la velocidad máxima permitida».

Las víctimas, satisfechas por la apertura del juicio

La plataforma de víctimas del accidente del tren Alvia en la curva de Angrois mostró ayer su satisfacción por la convocatoria del juicio oral contra el maquinista y el exdirector de seguridad del ADIF, aunque critica que hayan pasado ocho años sin que se hubiese celebrado el juicio, informa Vanessa Touceda. «Una Justicia lenta no es Justicia», lamentan. A punto de cumplirse ocho años del siniestro que provocó la muerte de 80 personas y dejó heridas a más de 140, la asociación cuenta con que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia haya acertado en sus previsiones y el juicio se inicie el primer trimestre del año que viene. «Ocho años son muchos años; algunas víctimas y familiares ya han fallecido y no se les podrá hacer justicia», reivindica el colectivo.

Los afectados por el descarrilamiento indican que también se deben esclarecer las responsabilidades políticas, para lo que siempre solicitaron la comisión de investigación en el Congreso de los Diputados. Lamentan que no se hayan podido proyectar unas conclusiones de esa comisión debido a la disolución de las Cortes. También siguen pidiendo que se realice una investigación independiente que reemplace a la única oficial que existe por ahora, la que fue realizada por la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios, que señala como única causa la distracción del conductor, lamentan.