¿Por qué Galicia será una de las pocas comunidades que no tenga que bajar las matrículas universitarias?

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO

GALICIA

XOAN A. SOLER

El Gobierno obliga a retomar en el 2022 los precios de hace once años; las universidades gallegas tienen sus tasas congeladas desde entonces

21 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

En un par de meses se reunirá la Conferencia General de Política Universitaria para fijar los precios máximos de la matrícula para el curso 2022-2023. Este año no habrá muchas sorpresas, ya que el acuerdo publicado en mayo del 2020 obliga a las instituciones a retomar los costes de las carreras del curso 2011-2012, para revertir la escalada de precios en las matrículas que se produjo bajo el mandato de José Ignacio Wert como ministro. Las universidades tenían hasta el curso 2022-23 para adaptarse a estas condiciones, pero Galicia no tiene gran trabajo por delante. La comunidad congeló precisamente hace 11 años los precios, por lo que podrá dejar sus tarifas idénticas. Eso sí, tampoco podrá subirlas.

En Galicia, el precio medio del crédito en la primera matrícula de grado -hay dos intervalos en función de la experimentalidad de la carrera- es de 11,89 euros, una cifra que se ha mantenido invariable en el último decenio. Esto supone un coste de 712 euros por curso, 308 menos que la media del conjunto de universidades públicas en el 2020-21, es decir, cada gallego se ahorra unos 300 euros al año por esta congelación de tarifas. En el caso de los másteres no habilitantes el ahorro es mayor en relación a los precios medios del resto de España (1.150) y en el de los habilitantes la cifra supera los dos mil euros.

Todas estas variaciones irán disminuyendo en base al acuerdo del 2020, y de hecho la diferencia entre el precio de las carreras gallegas y el resto será cada vez menor. Por ejemplo, estudiar en Cataluña suponía casi el triple que hacerlo en Galicia, pero la desigualdad ya no es tal.

Que el coste de las carreras sea igual al que tenían en el curso 2011-2012 no evitará que haya diferencias entre autonomías, porque ya entonces las había. Eso sí, el Gobierno ha marcado unos precios máximos, por lo que si se supera esa cifra la matrícula será incluso más barata que hace once años. Lo que dice el acuerdo es que si en aquel momento las universidades estaban muy por encima en cuanto a precios -superaban un índice 115 sobre el 100 de la media nacional-, deben limitar el coste del crédito a ese 115 (18,46 euros), por lo que la variación entre autonomías se mantendrá, ya que en Galicia el crédito tiene un coste medio inferior a los doce euros.

Según el Observatorio del Sistema Universitario catalán, aun cuando todas las instituciones adapten los precios, las comunidades más caras (Cataluña y Madrid) estarán un 56 % por encima de la más barata, Galicia.

Másteres

En cuanto a los másteres, también habrá cambios pero tampoco la comunidad gallega tendrá que acometerlos. Un año después de acordar que los grados no costarían en su primer matrícula más que lo que lo hacían en el 2011, el Ministerio publicó la misma norma para los másteres habilitantes públicos -menos del diez por ciento del total-, es decir, aquellos necesarios para ejercer una profesión, como los de abogados, procuradores, profesores de secundaria y FP, arquitectos o la mayoría de las ingenierías. En este caso Galicia sí debía bajar los precios, porque en el 2017, por ejemplo, cada crédito costaba 25,03 euros. Sin embargo, la Xunta ya redujo la matrícula en el curso 2018-19. Finalmente en la comunidad los másteres no habilitantes tienen también el mismo coste en primera matrícula, por lo que desde el 2020-2021 el precio del crédito es idéntico tanto en el grado como en estos posgrados, 11,89 euros

«Exemplo de contención»

Desde la Consellería de Educación aseguran que Galicia ya cumplía los criterios «e o por entón ministro Castells puxo á nosa comunidade como exemplo de contención das taxas universitarias». Por lo tanto la comunidad no ha modificado sus matrículas «e tampouco terá que facelo».

Tan solo Galicia y Asturias podrán dejar sus precios tal y como están actualmente, ya que aunque varias comunidades autónomas cumplen los criterios en relación a los estudios de grado, no sucede lo mismo con los másteres habilitantes, que deben bajar de precio en casi todas las autonomías.