La composición de la Mesa del Parlamento condicionará el nuevo Gobierno de Rueda

Manuel Varela Fariña
Manuel Varela SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

PACO RODRÍGUEZ

El presidente del PP gallego se reunirá esta semana con representantes del grupo parlamentario para abordar la elección de miembros del órgano rector

12 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Esta semana se despejarán las primeras incógnitas de una legislatura que arrancará el lunes con la designación de los nuevos miembros de la Mesa del Parlamento. Resta por descubrir si el BNG terminará cediendo o no al PSdeG uno de los dos asientos que corresponden a los nacionalistas. Una negativa del Bloque supondrá que los socialistas se sitúen por primera vez fuera del órgano rector de la Cámara en 42 años de autonomía. Otra de las dudas a resolver en los próximos días es la decisión que adopten los populares sobre los tres miembros que le dan la mayoría absoluta de la Mesa, lo que guarda además otra derivada: la composición del primer Consello de la Xunta confeccionado por Alfonso Rueda.

Está previsto que el presidente del PP gallego mantenga esta semana un encuentro con representantes del grupo parlamentario —su portavoz es Alberto Pazos, una de las personas de su máxima confianza, y la viceportavoz es Paula Prado, número dos del PPdeG— para abordar la designación de nombres. La propuesta será después debatida, y ratificada, por los cuarenta diputados populares en esta duodécima legislatura. Todo ello antes del lunes, cuando tendrá lugar la sesión constitutiva del Parlamento y se votarán los cinco nombres que conformen la Mesa.

El actual presidente de la Cámara, Miguel Santalices, reconoció tras la noche electoral sentirse «moi cómodo» en su cargo, evidenciando su predisposición a continuar al frente del Pazo do Hórreo: «Practicamente é a miña segunda vida, non coñezo outra situación». Distinto es el caso de Elena Candia, vicepresidenta del Parlamento durante la última legislatura y líder del PP provincial de Lugo.

La expresidenta de la Diputación lucense se encuentra entre las principales apuestas para entrar en el nuevo Ejecutivo de Alfonso Rueda, por lo que su designación como miembro de la Mesa retiraría su candidatura de las quinielas. «É un nome moi válido», reconoció el presidente popular, pero advirtiendo que cuenta también con «responsabilidades moi importantes» tras conservar la portavocía de su partido en Lugo como concejala. De entrar en el Gobierno gallego, seguiría los pasos de Diego Calvo, a quien relevó como vicepresidente del Parlamento cuando este entró en la Xunta como número dos de Rueda.

El PP deberá proponer, además, a otro diputado para asumir la vicesecretaría primera, que en la última legislatura ocupó la ya exdiputada Corina Porro. 

La decisión del BNG

La portavoz nacional del Bloque, Ana Pontón, reconoció este lunes que la cesión de un puesto en la Mesa será abordada en los próximos días por los «órganos de dirección» de la organización. Eso sí, la líder nacionalista marcó territorio tras ser preguntada por esa posibilidad: «É evidente que estamos ante unha lexislatura diferente á pasada, na que hai unha grande distancia entre os grupos parlamentarios». «O BNG case triplica en número de deputados e deputadas ao PSOE», recordó la líder de los nacionalistas, que volvió a incidir en el cambio del equilibrio de fuerzas en la izquierda: «O que queda claro é que esta é unha lexislatura diferente a anterior». 

El reparto de escaños para la sesión del lunes reserva solo dos asientos al PSdeG en primera fila

El BNG está a la espera de que el PSdeG realice una propuesta formal para lograr el quinto asiento de la Mesa del Parlamento. Como aseguró Pontón, esa posibilidad no se abordó en la primera reunión de trabajo celebrada ayer por la mañana con los 25 diputados del Bloque, sino por la cúpula del partido. La premisa, por ahora, es que la brecha de 16 parlamentarios a favor de los nacionalistas sobre el PSdeG supone un nuevo escenario en el hemiciclo gallego, donde el BNG tratará de evidenciar, como ya había hecho en la anterior legislatura, que son la única alternativa al PP al frente de la Xunta.

Y eso se constató también en la distribución espacial de escaños aprobada ayer al mediodía en la reunión de la Mesa de la diputación permanente. Este órgano, cuya vigencia expira el próximo lunes 18, está formado por los populares Miguel Santalices y Elena Candia y la nacionalista Montse Prado. Es decir, sin representación del PSdeG. La Mesa acordó que los populares ocupen en la primera sesión de la legislatura toda la parte derecha del hemiciclo, como ha hecho siempre, y que los 25 diputados del BNG se sienten en el grueso de la parte izquierda.

Los nacionalistas ganan un asiento más en la primera fila —segunda tras los sillones azules del Goberno—, dejando a los socialistas con solo dos escaños y otras dos butacas libres por el medio. En las dos hileras posteriores habrá tres socialistas en cada una, dejando a un noveno diputado al fondo, en solitario, junto al representante del grupo mixto, de Democracia Ourensana. La distribución definitiva se aprobará a partir de la próxima semana, una vez constituidos los grupos parlamentarios.