El PPdeG rechaza que Rueda comparezca en el Parlamento para explicar la financiación del Cunqueiro

Xosé Vázquez Gago
X.G. SANTIAGO

GALICIA

XURXO MARTINEZ | EFE

El BNG y el PSdeG, que apoyó la petición de los nacionalistas, califican de «estafa» de 470 millones de euros la construcción del hospital

14 ago 2024 . Actualizado a las 17:14 h.

La Diputación Permanente del Parlamento de Galicia ha rechazado hoy miércoles una petición del BNG para que Alfonso Rueda comparezca en un pleno extraordinario centrado en la construcción del hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo. Según la oposición se produjo un «sobrecusto» de 470 millones de euros, mientras el Gobierno del PPdeG sostiene que la obra fue correcta.

La propuesta del Bloque, que tiene 25 diputados, contó con el voto del PSdeG —nueve escaños— y el del único parlamentario de Democracia Ourensana. Fue rechazada por los 40 parlamentarios del grupo del PPdeG.

La petición del BNG se produce después de que el Consello de Contas de Galicia publicase un informe de fiscalización del contrato de la concesión del hospital.

En su página 17, el informe incluye un apartado titulado «Análisis económico del contrato y alternativas». Ese párrafo dice que «la alternativa de la licitación de la obra por una parte y la licitación de contratos de servicios por otra, es más eficiente que el contrato de concesión realizado, ya que se podrían alcanzar resultados similares a un menor coste».

El informe hace un cálculo que estima una diferencia «entre el importe de la proyección de pagos de ambas alternativas es de 382.234.537 euros (sin IVA) y de 470.469.422 euros (con IVA), lo que supone una diferencia en términos de valor actual nieto (VAN) de 133.439.273 euros y de 165.774.821 euros, respectivamente».

Añade que haber licitado la obra bajo esa modalidad «exigiría la renuncia de la Administración a la ejecución de gasto corriente o de otras inversiones para cumplir el objetivo de déficit».

En otro apartado, ya en su página 71, el informe reitera que «la Administración no estaría en condiciones de formalizar el contrato de las obras y de cumplir con los objetivos de déficit a los efectos de estabilidad presupuestaria sin renunciar a la ejecución de gastos corrientes o de otras inversiones»; aunque más adelante añade que, para la construcción en sí del hospital, «la opción más ventajosa sería la licitación de un contrato de obras para la ejecución de la infraestructura, por una parte, y la licitación de contratos de servicios, por otra».

El informe no califica de forma directa esa diferencia como sobrecoste. Es más, en su página 16 afirma que «la Administración no asumió sobrecostes por la ejecución de la obra», aunque sí se produjo una reducción de la superficie hospitalaria prevista. 

Montse Prado, diputada del BNG, acusó a los populares de ser unos «auténticos trileros» por no dar explicaciones sobre una «estafa» en el «sobreprezo» del centro sanitario. Prado consideró además que la política del PPdeG es «neoliberal» por permitir un «negocio redondo para a concesionaria e ruinoso para a sociedade galega»

Prado recordó que el Sergas «licitou un orzamento máximo para o hospital de 374.371.630 € e estableceu un canon a pagar en 20 anos de 659.561.032 euros». Se produjo por lo tanto «un beneficio para a empresa de 285.100.997, nada máis e nada menos que o 76%, cun tipo de xuro establecido no contrato do 2.5% e cunha taxa 0 de risco». Destacó también la citada disminución de metros útiles en diversas áreas hospitalarias «sen ningunha consecuencia».

A su juicio, la construcción fue desde el principio un «escándalo, na polémica e na sospeita de que era un ruinoso negocio para os galegos (...), para as arcas públicas, e pola contra, un magnífico negocio para as empresas».

La diputada nacionalista insistió en que el asunto debe debatirse en el Parlamento.

El portavoz del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, acusó al anterior presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, y al actual, Alfonso Rueda, de hacer que los gallegos paguen 470.469.422 euros de «sobrecuste» por decidir que la inversión en el hospital, «tiña que ser máis beneficiosa para os fondos especuladores que para a cidadanía».

Besteiro consideró que «si, era posible» construir el hospital con fondos y titularidad plenamente pública. Señaló además que la decisión de optar por ese modelo de contratación «realizouse sen unha análise comparativa previa en termos de eficiencia e eficacia con respecto a unha adxudicación de contrato público tradicional». En su página 68, el documento del Consello dice que «no existe ningún documento previo que examine las distintas opciones, siendo los dos únicos documentos que analizan estas variables el estudio de viabilidad y la memoria económica complementaria».

Besteiro recordó las denuncias de su partido «dende que se iniciou esta falcatruada» y también que presentaron alternativas ante lo que calificó como «estafa». «Eu mesmo, hai unha década, xa fixen a proposta de reverter o Hospital Álvaro Cunqueiro á titularidade plenamente pública e resolver o grave problema de seguir pagando a fondos especuladores privados e entregarlles parte da xestión do hospital. Era posible e é posible».

Besteiro insistió en que esa solución aún es viable y exigió responsabilidades políticas citando al propio Feijoo, quien dijo que «cando un político inaugura un hospital debería preguntárselle: ‘O hospital está pagado ou queda a deber?'. E xa o dixo el: ‘Se queda a deber, faga o favor de marcharse inmediatamente e empezar a pagalo'». Concluyó recomendando a los populares gallegos que hagan caso a su anterior líder. 

El portavoz del PPdeG, Alberto Pazos, señaló que el informe del Consello de Contas «non sinala nin unha sola irregularidade». Pazos subrayó la satisfacción de su partido por haber construido «un dos mellores hospitais de Europa e facelo en tempo récord». El informe, en su página 72, afirma que «hay que subrayar que la construcción y puesta en marcha del hospital se realizó en un plazo inferior a lo que viene siendo habitual en la contratación tradicional de la obra, por lo que existe un beneficio socioeconómico vinculado a este hecho que no está cuantificado».

Esa celeridad, aseguró el portavoz, permitió que estuviese operativo en la pandemia del covid, cuando «salvou centos de vidas».

Pazos comparó el sistema elegido por la Xunta para hacer el hospital con la hipoteca de una vivienda, ya que las familias «priorizan» tener un techo antes que evitar pagar intereses.

El portavoz popular recordó que el bipartido PSdeG-BNG fue «incapaz» de iniciar la obra durante su mandato (2005-2009) pese a la «bonanza» económica, y tuvo que ser su partido el que la pusiese en marcha en plena crisis y pese al «bloqueo» del Concello de Vigo.

Armando Ojea, representante de DO, explicó su apoyo a la propuesta del BNG para escuchar las «explicacións pertinentes» del Gobierno gallego sobre esa diferencia en los costes de hacer la obra de la que habla el Consello de Contas «en termos prácticamente obxectivos».