Los usuarios del ferrocarril exigen al Gobierno que aclare cuanto antes cómo van a ser los descuentos a partir del 1 de enero
GALICIA
El Congreso aprueba la creación de un abono universal para el transporte público en todo el país y certifica el fin de la gratuidad. «Las próximas decisiones determinarán nuestra movilidad, empleo, estudios y calidad de vida», constatan los viajeros recurrentes.
01 nov 2024 . Actualizado a las 19:34 h.Justo el día en el que el Congreso debatía el futuro de las bonificaciones en el transporte público, apoyando la creación de un abono único y universal para todo el país y certificando la defunción de la experiencia de la gratuidad, la Plataforma de usuarios de media distancia ha hecho pública una carta abierta en la que exponen su inquietud por la solución que adoptará el Gobierno a partir del 1 de enero, cuando expiran los actuales abonos ferroviarios gratuitos. Quieren que el Gobierno explique cuanto antes cuál será el modelo de bonificaciones que estará en vigor el año que viene para poder adaptar su economía doméstica al nuevo escenario. Hay que recordar que, para un usuario recurrente del trayecto entre A Coruña y Vigo, la gratuidad suponía un ahorro de unos 4.000 euros al año.«El fin de la bonificación está previsto para este diciembre de 2024 y esta carta se escribe finalizando octubre sin que nada se haya aclarado. Dado el perjuicio que esta incertidumbre nos supone y el impacto presupuestario que puede suponer, los usuarios y usuarias de Galicia demandamos estabilidad y anticipación», aseguran en el documento.
Los viajeros recurrentes que utilizan el ferrocarril para trasladarse a los centros de trabajo o de estudios plantean dos opciones: o mantener el régimen actual -algo que parece descartado a no ser que algún grupo lo ponga como condición ineludible en la negociación de los Presupuestos- o crear «abonos asequibles y flexibles que sirvan para garantizar el acceso a la media distancia respetando su ser como servicio esencial de movilidad». En una reunión reciente, altos cargos de Transportes les explicaron que estaban valorando la creación de un abono a mes vencido con el que pague menos el que más viaje, algo que los usuarios verían con buenos ojos a falta de ver cómo se implementa.
En paralelo, ven necesario mejorar la fiabilidad de los servicios ferroviarios en el eje atlántico y en la conexión Santiago-Ourense. «Las averías, incidencias, retrasos y la suspensión de circulaciones junto con el decalaje en la información a usuarios y la rigidez de la anulación en los 60 minutos previos a la salida prevista del tren, suponen uno de los principales problemas», explican. También reclaman que se adapten los horarios a las necesidades de los usuarios. Constatan que no hay ningún tren media distancia que conecte A Coruña y Santiago con Vigo y que llegue a la ciudad olívica antes de las 8.00 horas, «y el primer tren madrugador hacia A Coruña llega justo a esa hora».
La proposición no de ley de Sumar que hoy aprobó el Congreso, con enmiendas del PSOE y del PP, certifica el fin de la gratuidad, aunque mantiene el esfuerzo económico para bonificar el uso del transporte público (unos 600 millones de euros), destinándolo a financiar descuentos en tarifas para «aquellas personas para las que el precio repercute en la elección modal y a ofrecer más y mejor transporte público».
En un segundo punto de la iniciativa, el Congreso insta al Gobierno a comenzar a estudiar, con la participación de las comunidades autónomas y de las administraciones locales -tal y como propuso el diputado ourensano del PP Celso Delgado-, modelos de abono único, o unificación de tarifas, que puedan mejorar la conectividad y eficiencia y reducir la burocracia de las diferencias tarifarias actualmente existentes, así como su futura implementación.