
La octava edición de Primavera no Camiño Inglés tuvo lugar en Miño, organizada por la Asociación de Concellos de ese itinerario. Se trata de una concentración de carácter festivo en la cual cada uno de los dieciocho municipios de esa ruta jacobea exponen sus puntos fuertes, y ello incluye desde paneles a folletos, y desde demostraciones culinarias con los productos propios de ese territorio a las nuevas tecnologías aplicadas a los monumentos. Y, como en las anteriores ediciones, se reconoció el trabajo desarrollado por una persona o institución. Nada que objetar a los homenajeados en años anteriores, pero desde luego el aplauso general a Rafael Sánchez Bargiela fue más que merecido. Se trata del ex director gerente que se lanzó en el año 2014 a recuperar el Camino Inglés en Gran Bretaña desde sus comienzos, en el norte del país y cerca de Escocia. Concello de Oroso y Diputación de A Coruña, y desde su nacimiento la mencionada asociación, se sumaron al esfuerzo. El carácter abierto y la perenne cordialidad de Rafael Sánchez potenciaron el trabajo en común y permitieron que esa obra avanzara: ya hay 350 km identificados y señalizados en Inglaterra.
Reunión en Malta
Y mientras todo eso tenía lugar, en Malta se reunían dos docenas de asociaciones jacobeas, incluidas algunas tan lejanas como la danesa y la sueca. Una puesta al día siempre necesaria con un objetivo: que los Caminos de Santiago no acaben siendo unas rutas turísticas vacías de contenido. A Galicia le va mucho en ello, porque rutas turísticas magníficas hay muchas en el mundo entero, y ahí sí que no es posible competir.
Hasta en Argentina
La reciente presentación del Camino del Cura Brochero, en la Oficina del Peregrino de Santiago y bajo un sol insistente que solo se agradeció en los primeros minutos, es un paso más en la internacionalización de la iniciativa gallega impulsada desde 1993 con el primer Xacobeo. No porque haya pasado por esa ruta jacobea ningún peregrino rumbo a Compostela, sino porque es una muestra del interés por copiar ese modelo de éxito llamado Camino de Santiago. Hace bien la Xunta en respaldar tales iniciativas, igual que hace bien en no reconocer ni un solo Camino más, algo que sería insostenible desde el punto de vista histórico y que provocaría protestas y desencuentros por toda Galicia adelante.