Los agentes de la policía autonómica dispondrán de 250 chalecos antibalas que costarán 227.000 euros

La Administración gallega ha abierto el procedimiento para equipar a la policía autonómica —la unidad de la Policía Nacional adscrita a la comunidad gallega— con 250 chalecos antibalas, anticuchillos y antipunzones. Este refuerzo de material, que es la primera vez que se hace, tiene un presupuesto de 227.000 euros, según consta en el portal que informa sobre la contratación pública de la Xunta. El plazo de presentación de ofertas finaliza el próximo 23 de julio, es decir, aproximadamente dentro de un mes. Los chalecos, tanto masculinos como femeninos, deberán garantizar los niveles de protección en toda la superficie, cubriendo pecho, espalda y costados, sin causar molestias en el cuello y las axilas. También tendrán que ofrecer protección lateral de 360 grados y ser lo más confortable posible, especialmente en cuanto a ligereza, flexibilidad y acomodación al cuerpo, permitiendo que la persona usuaria pueda sentarse y conducir vehículos con comodidad y portar y utilizar el arma reglamentaria. Para la conformación de los chalecos femeninos no se permitirá ningún tipo de corte, costura ni aumento de espesor. Cada chaleco se suministrará con una funda exterior de su correspondiente talla, tal y como establece la Xunta en el contrato público. Las fibras que conformen el paquete balístico serán resistentes al calor y al frío y deberán mantener sus propiedades entre los treinta grados bajo cero y los cien grados positivos, como mínimo. El paquete balístico con la funda antihumedad tendrá un espesor máximo de 6,5 milímetros.

Tal y como explican desde la Consellería de Presidencia, la iniciativa se enmarca en la apuesta de la Xunta por la mejora de las dotaciones de los servicios de atención a las emergencias y, concretamente de la Policía Autonómica, para reforzar la eficacia de su labor. En esta línea de acción, hace unos meses se hizo entrega de dos drones a la Unidad Policial Adscrita de Galicia. Se trata de un dron acuático y de otro aéreo, que servirán para apoyar las funciones de este cuerpo policial en áreas como la lucha contra el furtivismo y los incendios forestales y la protección del medio ambiente, entre otras relacionadas con la seguridad y la protección. En los últimos años también se renovó el parque móvil de la unidad, así como la equipación informática. Con el equipamiento de 250 chalecos, según la Xunta, se refuerzan las medidas de seguridad de un cuerpo que trabaja en situaciones de riesgo.

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