Óscar Puente describe la «tormenta perfecta» ferroviaria: trenes antiguos que se quedaron obsoletos y otros nuevos, los Avril, con «fallos excesivos»

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El ministro de Transportes, Óscar Puente, este lunes, con la ministra de Igualdad, Ana Redondo
El ministro de Transportes, Óscar Puente, este lunes, con la ministra de Igualdad, Ana Redondo Jesús Hellín | EUROPAPRESS

El ministro de Transportes insiste en la escasa fiabilidad de los AVE de la serie 106, que tuvieron que ser retirados de la línea Madrid-Barcelona y que son los que prestan servicio en la línea Galicia-Madrid

01 sep 2025 . Actualizado a las 18:35 h.

Una «tormenta perfecta». Así define el ministro de Transportes, Óscar Puente, el escenario al que se enfrenta Renfe con su material rodante, con trenes antiguos «que se han quedado obsoletos» y otros que son nuevos, los Talgo Avril de la serie 106, pero que tienen unos fallos «excesivos». Desde su punto de vista, los trenes nuevos «dan fallos de juventud» y los más antiguos «están en sus últimos años de vida».

En una entrevista en RNE, el responsable de las políticas estatales de movilidad aseguró que el Gobierno trabaja en solucionar esa coyuntura con inversiones récord, tanto en la compra de nuevo material rodante como en obras en las vías, alcanzado solo el año pasado 4.500 millones de euros de contratos ejecutados.

Los Avlo de la serie 106 han sido retirados de la circulación en la línea Madrid-Barcelona al detectarse fisuras en los bastidores de los bogies, una situación que está también relacionada con el estado de la vía en este corredor. En Galicia, Renfe garantiza que los AVE y los Avlo con tecnología Avril no están dando estos problemas, al menos por el momento. El ministro prevé visitar en unos días la fábrica de trenes de Siemens en Alemania para buscar alternativas ante esta situación.

El ministro ha intentado explicar el motivo de las incidencias que se están dando en la red ferroviaria en los últimos meses, principalmente con tres razones: el mayor número de trenes en circulación, lo que satura la red; los continuos fallos de los trenes, y la mayor cantidad de obras en las vías, lo que impacta directamente en el servicio.

«Cuando se habla de la década de los noventa, estábamos en el millón de usuarios y había solo seis trenes por día entre Madrid y Sevilla. Hoy, con casi 50 millones de viajeros, y en algunos puntos pasan 289 trenes al día. Si se para un tren, hay otros diez detrás y otros diez en el otro lado en una franja de 45 minutos. En los años noventa se paraba un tren y había tres horas de margen. Ahora no», explicó.

Óscar Puente volvió a reconocer que los nuevos trenes de la serie 106 de Talgo (los Avril que prestan servicio en Galicia) «no han dado el resultado esperado», y esos son los únicos trenes nuevos que han entrado en operación desde el 2008, tras los recortes económicos que se llevaron a cabo tras la crisis financiera.

En cuanto a las obras en la infraestructura, ha explicado que en países como Alemania, donde el 50 % de los trenes llegan con más de 15 minutos de retraso -en España son el 20 %-, cortan las líneas (Berlín-Hamburgo en este caso) mientras hacen obras, mientras que en España se compaginan con el servicio, lo que da lugar a mayores incidencias.

Por último, también ha añadido una cuarta razón al incremento de los problemas en la red: las incidencias ajenas a la red, como los incendios, que este verano han supuesto el 23 % del total, frente al 7 % del año pasado.