Kate Middleton asegura que está haciendo «buenos progresos», aunque seguirá a tratamiento «unos meses»

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The Prince and Princess of Wales

La princesa de Gales anuncia su regreso a la vida pública este fin de semana y prevé unirse a nuevos compromisos este verano

15 jun 2024 . Actualizado a las 12:34 h.

La princesa de Gales, Kate Middleton, ha reaparecido hoy junto a su familia a la ceremonia con la que se celebra de forma oficial el cumpleaños del rey Carlos III, el desfile militar Trooping the Colour. Se trata de su primera aparición oficial en público desde el pasado mes de diciembre y desde que anunció que padece cáncer el pasado mes de marzo.

La propia Catalina desveló su reaparición en un mensaje escrito difundido por el Palacio de Kensington -su residencia oficial- junto a una foto reciente. En él dice que está haciendo «buenos progresos» en la lucha contra la enfermedad, y todavía seguirá «unos meses» con su tratamiento oncológico.

El palacio de Kensington desmintió hace pocos días los rumores que apuntaban a que la esposa del heredero al trono, el príncipe Guillermo, se encontraba en un hospital de Houston, Estados Unidos, especializado en oncología.

Kate Middleton empieza el mensaje, publicado en la tarde de este viernes, agradeciendo todos los «mensajes de apoyo y aliento de los últimos meses». «Realmente ha marcado una gran diferencia para William y para mí y nos ha ayudado a ambos en algunos de los momentos más difíciles», señala.

«Estoy progresando mucho, pero como sabrá cualquiera que esté pasando por quimioterapia, hay días buenos y días malos. En esos días malos te sientes débil, cansado y tienes que rendirte a que tu cuerpo descanse. Pero en los días buenos, cuando te sientes más fuerte, quieres aprovechar al máximo el hecho de sentirte bien».

La nuera del rey Carlos III confirma que continúa sometiéndose a tratamiento y que seguirá así «durante unos meses más». «En los días en que me siento lo suficientemente bien, es un placer involucrarme en la vida escolar, dedicar tiempo personal a las cosas que me dan energía y positividad, además de comenzar a trabajar un poco desde casa».

«Tengo muchas ganas de asistir al desfile del cumpleaños del rey este fin de semana con mi familia y espero unirme a algunos compromisos públicos durante el verano, pero también sé que todavía no estoy fuera de peligro. Estoy aprendiendo a ser paciente, especialmente ante la incertidumbre. Tomar cada día como viene, escuchar a mi cuerpo y permitirme tomarme este tiempo tan necesario para sanar».

Muchas gracias por su comprensión constante y a todos los que tan valientemente han compartido sus historias conmigo».

Este es el primer mensaje oficial de la princesa de Gales desde el vídeo que publicó a finales de marzo anunciando que padece cáncer y que estaba iniciando por entonces un tratamiento de quimioterapia que había mantenido en privado. En un vídeo de dos minutos grabado en los jardines de su residencia, la princesa de Gales, sentada en un banco visiblemente más delgada y nerviosa, explicaba que los médicos le habían aconsejado someterse a un proceso de «quimioterapia preventiva».

 

Explicó que el misterio que durante meses se mantuvo en torno a su enfermedad se debía a que la cirugía abdominal a la que fue sometida en enero no apuntaba, en principio, a que se tratase de un cáncer, del que fue diagnosticada más adelante en unas pruebas posteriores a la intervención. «En enero, me sometí a una importante cirugía abdominal en Londres y en ese momento se creía que mi enfermedad no era cancerosa. La cirugía fue exitosa. Sin embargo, las pruebas realizadas tras la operación hallaron que había habido cáncer. Por lo tanto, mi equipo médico recomendó que me sometiera a un tratamiento de quimioterapia preventiva y me encuentro ahora en sus fases iniciales», dijo Catalina.

La princesa, de 42 años, afirmaba en marzo que los meses previos habían sido muy duros para ella y para toda su familia. «Me ha llevado tiempo recuperarme de una cirugía mayor para poder empezar el tratamiento», confesaba.

«Esperamos que entiendan que ahora necesitamos como familia algún espacio, tiempo y privacidad mientras completo mi tratamiento», pedía entonces la princesa, que no ha vuelto a aparecer en público.

Desde el primer anuncio de su enfermedad, en enero, se avanzó que Middleton pasaría varios meses recuperándose y apartada de sus actividades oficiales. La ausencia de información y su larga convalecencia hizo que la inquietud por la princesa fuese en aumento ante el convencimiento de que su estado no evolucionaba de forma positiva. Los rumores se dispararon cuando, el pasado 28 de febrero, el príncipe Guillermo se ausentó de forma repentina y a última hora del funeral por el rey Constantino de Grecia, organizado por la familia real británica en la capilla de Windsor. A partir de ahí creció en la opinión pública la idea de que entre las paredes de palacio ocurría algo que la familia real no había revelado todavía. Y así era. Más tarde se sabría que aquel fue el día en que Kate y Guillermo recibieron sin esperarlo el diagnóstico de su cáncer.

La presión sobre los príncipes de Gales creció tras la publicación de una fotografía de familia con la que intentaron tranquilizar a la población sobre el estado de Kate Middleton, pero que pocas horas después se reveló que había sido manipulada. La propia Kate confesó haber alterado la imagen. La expectación mundial por conocer la verdad sobre su estado de salud llegó hasta el punto de que su historial médico sufrió un intento de espionaje en el clínica donde fue intervenida.

Otro vídeo de Kate y Guillermo de compras en una tienda de productos agrícolas mostró a la princesa caminando con agilidad y llevando las bolsas, aunque con una notable pérdida de peso.

Había planes iniciales para que la princesa volviera la vida pública después de Semana Santa, pero todo eso quedó finalmente aplazado hasta su recuperación.