Un triunfo tan sufrido como merecido

MÍRIAM V. F. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

Óscar Vázquez

Dos goles de Aspas permiten al Celta sumar de tres por primera vez este curso

20 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta logró una sufrida pero merecida victoria frente al Valencia en Balaídos. 30 grandes primeros minutos fueron la carta de presentación de los celestes, que se fueron al descanso por delante pero vieron cómo Maxi cumplía la ley del ex y empataba el partido. El segundo, también de un gran Aspas, valía el triunfo.

Once

Tres novedades respecto a Ipurua

Óscar García Junyent introdujo tres novedades con respecto al once del empate ante el Eibar una semana antes. El recién llegado Murillo fue de la partida en sustitución de Néstor Araujo, y además, dio entrada a Fran Beltrán y a Denis, que no habían jugado en el partido inaugural, dejando en el banquillo a Okay Yokuslu y Brais Méndez. Iago Domínguez fue el descarte y Ruly García, el portero suplente.

Inicio

Un arranque arrollador

El Celta anuló completamente al Valencia en durante la primera media hora de partido. Solo se jugaba en campo visitante y los vigueses, activos y presionando, encontraban con facilidad la portería defendida por Jaume. Después de varias oportunidades fallidas, incluidos un primer disparo de Denis que se fue alto por poco y un intento de falta de Nolito, llegó el gol de Iago Aspas tras una gran acción del gaditano. Con suspense, porque Gil Manzano recurrió al VAR para que determinara si era legal.

Ocasiones

El Valencia, peligroso solo a balón parado

Iván Villar apenas tuvo trabajo en el primer tiempo y las pocas ocasiones del Valencia llegaron en la recta final de y a balón parado. Dos faltas peligrosas fueron las mejores alternativas de los de Javi Gracia, que no estuvieron acertados tampoco en esa faceta. El otro debe de los primeros 45 fue la tempranera tarjeta de Renato Tapia. Además, ya con los célticos por delante, Aspas pidió un penalti de Gayà que el colegiado no señaló.

Segunda parte

Mal arranque, gol de Maxi y reacción inmediata

El inicio del segundo tiempo no tuvo nada que ver con el del partido. El Celta salió con una marcha menos y vivió momentos críticos que tuvieron su reflejo en el gol de Maxi Gómez, que no celebró el excéltico por su pasado en Vigo. Sin embargo, diez minutos después aprovechaba Iago Aspas una falta para hacer el segundo y poner el que sería el 2-1 definitivo.

Cambios

Cinco sustituciones para dar aire al equipo

En esta ocasión sí agotó los cambios Óscar García Junyent. En primer lugar dio entrada a Miguel Baeza y Okay por Denis Suárez y Beltrán. El andaluz tuvo un par de ocasiones claras para haber sentenciado el partido. A continuación, retiró a Emre Mor, que mostró su enfado en el banquillo en un partido en el que no dejó tan buenas sensaciones como en el debut y la pretemporada. Por último, Óscar dio la alternativa en un segundo doble cambio al canterano Gabri Veiga y con él entró Néstor, retirándose Murillo y Tapia, lesionado.

Desenlace

Sufrimiento con ocasiones desperdiciadas

El Celta dispuso de un buen puñado de ocasiones en la recta final para haber sentenciado el partido, pero acabó sufriendo con un alargue de siete minutos después de que Aidoo quedara tendido por un choque fortuito con los cambios ya agotados. Finalmente, el ghanés pudo seguir y una buena parada de Iván evitó males mayores.