Marián Mouriño quiere pasar página a un año «convulso», proclamando su ambición en un año en donde quiere «mirar hacia arriba»
20 sep 2024 . Actualizado a las 20:52 h.Marián Mouriño cumple un año en el cargo de presidenta del Celta. Define sus primeros doce meses como «un año convulso» y proclama que la posibilidad de llevar al club a otro nivel pasa por la cantera y los recursos que genere Galicia Sports 360. La ejecutiva destaca el papel de Claudio Giráldez, al que considera la «guinda» perfecta para su proyecto y no quiso entrar en las acusaciones de Rafa Benítez. En su análisis no faltó un hueco para As Celtas, su apuesta más personal.
BALANCE
«Ha sido un año convulso, de muchas emociones»
Aunque el relevo oficial se hizo en la junta de accionistas del pasado mes de diciembre, Marián Mouriño es desde el pasado 28 de septiembre presidenta del Celta. A modo de balance, comenta: «Ha sido un año convulso, de muchas emociones, desde una sucesión del presi a mí con lo emotivo que eso lleva y a partir de ahí, la ilusión a raíz del centenario y cómo empezamos con una apuesta como nunca se había hecho a nivel de entrenador». Desde su prisma, considera que están «haciendo un Celta de todos, más fuerte», que ha recuperado la paz social y que vive un momento social esplendoroso. Piensa, que en este tiempo su mayor logro fue «haber acertado con la gente» de la que se rodeó y las emociones que ha sentido del celtismo, «esta emoción y sensaciones tan buenas» que le transmiten todos los días «desde todos los ámbitos».
EL PROYECTO
El futuro pasa por la cantera y los recursos que genere GS 360
Marián Mouriño también lleva grabada a fuego la palabra cantera. «El proyecto que tenemos para llevar al Celta a otro nivel también pasa por Afouteza y GS360, donde nuestros canteranos se desarrollen no solo a nivel deportivo», comentaba la presidenta en primera instancia sin olvidarse de las instalaciones de A Madroa: «No nos podemos olvidar de ella. Tiene que seguir formando una parte importante de nuestra historia, es la casa de muchos canteranos y ahora, canteranas».
OBJETIVO
«Sin ponernos número queremos mirar hacia arriba»
La presidenta sueña con vivir un año bonito, pero no quiere ponerse un objetivo concreto, sino que proclama su ambición: «El límite salarial nos marca un objetivo donde, sin ponerle número, queremos mirar hacia arriba, salir de esos años de mirar hacia abajo y tratar de hacer las cosas bien. Confío en que hay ambición desde todas las áreas para conseguir algo bonito», sentenció.
SOBRE BENÍTEZ
«Cuidamos a nuestra gente, cuando no estén, no entrar en polémicas»
Rafa Benítez, que había sido una apuesta personal suya para el banquillo, envió un par de mensajes al Celta desde que fue cesado la pasada temporada. Sin embargo, la presidenta no quiso rebatirle: «El Celta tiene que estar por encima de entrenadores y jugadores que hagan declaraciones. Cuidamos de nuestra gente, cuando no estén, preferimos no entrar en polémicas», se limitó a indicar.
«Cierra el círculo»
La apuesta por el banquillo de un técnico de casa como Claudio Giráldez «cierra el círculo de las raíces, de identidad y de cantera, es la guinda». «Él tiene amor y pasión por el club, se le nota, está alineado y apuesta por chicos que crecieron con él. Ha llegado en el momento ideal, nos sentimos representados en el césped», valora. La presidenta también considera fundamental al técnico para lograr el ambiente que hay ahora en Balaídos.
«Es increíble la acogida que ha tenido»
Un aspecto capital en la gestión de Mouriño Terrazo es la puesta en marcha de As Celtas, el proyecto de fútbol femenino del club, que en palabras de la presidenta, ha tenido una acogida «increíble» después de la que institución llevase «100 años pensando en masculino». Destaca el seguimiento que está teniendo.