Los aficionados de Gol se despiden esta noche de su grada antes del inicio de las obras
GRADA DE RÍO


































































































Claudio Giráldez admite nostalgia, pero se queda con el progreso que supone para el club la reforma
21 feb 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La grada de Gol, como se la conocía hasta ahora y desde los años 70, vivirá este viernes, ante el Osasuna, su último partido antes de ser demolida y levantada nuevamente. Es el único fondo que queda por reformar del estadio de Balaídos y se prevé que pueda volver a acoger aficionados en dos años.
Hoy, los abonados y titulares del Carné Celtista que previamente se hayan inscrito podrán realizar a lo largo de todo el día visitas de veinte minutos a las instalaciones, que viven sus últimos coletazos. Por la noche, abonados de esa grada, también anotados previamente, podrán ejercer de abanderados sobre el césped de Balaídos mientras suene Oliveira dos cen anos.
Claudio Giráldez se refirió ayer a este adiós, que ve como algo positivo por lo que supone contar con un estadio reformado por completo, si bien también siente nostalgia por ser la grada donde asistió a sus primeros partidos. «Es un progreso para el club. Tendremos un campo modernísimo y perfecto para lo que requiere el fútbol hoy en día. Es un día nostálgico para todos, pero hay que verlo con optimismo y esperanza». Estuvo en Gol en el España-Brasil de 1999.