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18 may 2025 . Actualizado a las 21:24 h.El Celta tendrá que esperar para certificar su pase a Europa, que sigue teniendo en su mano, pero que se le complica. Todo estaba de cara para que el cuadro de Claudio Giráldez cerrase a lo grande su año en Balaídos: un ambiente espectacular, la grada entregada y un gol a favor en el arranque de partido. Anotó Marcos Alonso de penalti, pero dos licencias defensivas permitieron al Rayo Vallecano darle la vuelta al marcador antes del descanso. Primero, Isi, de cabeza, y después, De Frutos, en un desliz monumental de todo el sistema defensivo celeste.
Y aunque el Celta fue un vendaval durante los primeros 20 minutos de la segunda mitad, le faltó puntería y una pizca de suerte para conseguir el punto que le hubiera dado el pasaporte para Europa. Ahora, ya no le vale el empate para la Conference y tendrá que ganar en la última jornada, en Getafe, para certificar el pase que merece su temporada. Un patinazo que tiene solución.
El partido de la ilusión comenzó de la mejor manera para el Celta, marcando en la primera llegada, desde los once metros, pero el Rayo, que había salido intenso, le dio la vuelta al marcador antes del descanso aprovechando dos licencias defensivas del conjunto vigués.
Marcos Alonso, la más esperada de las cuatro novedades del once celeste, fue protagonista. Porque adelantó a los celestes con un penalti a lo Panenka, con una gran frialdad y dándole igual que Batalla estuviese enfrente; pero ocho minutos después, el madrileño perdió la marca e Isi Palazón marcó de cabeza. Para entonces, el Rayo ya había dado un paso adelante para negar la salida de balón a los vigueses a base de intensidad y para dejarse ver en zonas de ataque. El Celta se estiraba con la salidas de Óscar Mingueza y las carreras de Williot Swedberg, pero solo Fer López fue capaz de meterles el miedo en el cuerpo a los vallecanos con una jugada de fantasía que acabó en córner.
El Rayo mandaba, pero tampoco intimidaba, salvo en un balón filtrado que sacó Yoel Lago, si bien en uno de los cuatro minutos de alargue de la primera mitad, Lejeune encontró a De Frutos libre de marca en el corazón del área y el atacante, que no delantero de referencia, hizo un quiebro que llevó a Yoel al suelo y marcó a placer con un tiro ajustado.
El Celta fue un ciclón durante un buen trecho de la segunda mitad. Nada más ponerse el balón en juego, los vigueses crearon un par de ocasiones clarísimas, una de ellas, salvada por Iván Balliu desde el suelo cuando la pelota ya se colaba. A continuación, un tiro cruzado de Swedberg, que le creó muchos problemas a la zaga rival, salió ajustado por el palo largo.
Parecía que el empate caería por derribo ante un rival que no solo defendía en bloque bajo, sino que metía a todo su equipo en el área defendiendo por acumulación. En este contexto, hubo una jugada cuando menos dudosa, con Pathé Ciss empujando a Pablo Durán dentro del área, pero Pulido Santana, con un arbitraje sibilino a lo largo de toda la contienda, no quiso saber nada.
A falta de 20 minutos, Claudio Giráldez metió en el campo a Iago Aspas y Balaídos se vino abajo, pero al Celta le comenzaron a fallar las fuerzas y los cambios revitalizaron al Rayo, que empezó a salir de la cueva. Aun así, los vigueses tuvieron la última tras un disparo de Fran Beltrán que repelió Batalla. Como en otras ocasiones, Javi Rodríguez estaba con la caña preparada, pero su cabezazo, sin fuerza, acabó en las manos del meta rival. Un fiasco que se puede arreglar en el epílogo de Getafe.
Ficha técnica
Guaita; Yoel Lago, Javi Rodríguez, Marcos Alonso (Carlos Domínguez, min 84); Mingueza, Beltrán Moriba, Ristic (Hugo Álvarez, min 80); Fer López (Aspas, min 69), Williot Swedberg (Alfon, min 80) y Pablo Durán (Borja Iglesias, min 84).
Batalla; Balliu, Lejeune, Pathé Ciss, Pacha (Chavarría, min 61); Andrei, Unai López, Óscar Valentín (Álvaro García, min 60), De Frutos (Trejo, min 88); Isi y Embarba (Gumbau, min 61).
GOLES: 1-0, min 10: Marcos de penalti; 1-1, min 18: Isi; 1-2, min 45: De Frutos.
ÁRBITRO: Pulido Santana (Comité canario). Amonestó a Marcos Alonso y Yoel Lago por parte del Celta, y a Álvaro García, Lejeune y Pathé Ciss del Rayo Vallecano.