Stuttgart-Celta: un golpe de aprendizaje sobre qué significa jugar en Europa

JORGE OTERO VIGO

GRADA DE RÍO

RONALD WITTEK | EFE

25 sep 2025 . Actualizado a las 23:27 h.

Creo que el Celta que se ha visto en el campo del Stuttgart no es al que estamos acostumbrados, pero está claro que esto tiene que servir de aprendizaje sobre qué significa jugar en Europa. Es cierto que, posiblemente, los alemanes eran el combinado más duro para los celestes en esta fase de liga. Durante casi todo el partido el Celta estuvo a merced de su rival; lo apostó todo a un juego quizás demasiado en corto y la presión fue insuficiente.

En cuanto al once, a todos nos sorprendió, por ejemplo, la ausencia de Sotelo, que venía de tener juego, o Javi Rueda. Siempre es muy difícil acertar cuáles van a ser los once elegidos por Claudio. Muchas veces, y más jugando tres competiciones, las rotaciones son fundamentales para lograr que los jugadores tengan frescura, pero el Stuttgart no dejó hacer. Cuando no hay recursos suficientes para crear juego, hay que buscar alternativas, y esas, por desgracia, tampoco salieron.

La sensación fue que faltaba profundidad y que, en ataque, Borja hubiese venido bien para recibir de cara. En frente había un equipo tremendamente físico que impuso ya desde el inicio una presión muy alta e intensa. Además, el ambiente en el estadio del Stuttgart también le pudo pesar a algún que otro jugador.

Mi sensación es que hay que sacar conclusiones sobre esto, pero tampoco obsesionarse ni intentar mirar más allá. No cabe duda de que el equipo tiene mucho margen de mejora. Lo más importante en este caso es que no se pierda la ilusión; ya sabíamos que estar en competición europea y todo lo que ello exige no es fácil, pero va a servir para que los jugadores crezcan. Estos golpes vienen bien para darnos cuenta de qué es Europa y despertar. La próxima, el jueves ante el PAOK en Balaídos.