Pocos concursos son capaces de reunir a un ucraniano de 2,35 metros de altura, al Ejército Suizo de Salvación, un himno compuesto por ABBA y a la estrella de los 80 Bonnie Tyler
16 may 2013 . Actualizado a las 19:02 h.Eurovisión 2013 levanta el telón y arranca el espectáculo. Pocos concursos de música son capaces de reunir sobre el escenario al Ejército Suizo de Salvación, a un ucraniano de 2,35 metros de altura, un himno compuesto por ABBA y a la estrella de los 80 Bonnie Tyler. Pero a Eurovisión, que este año se celebra en la ciudad sueca de Malmö, no hay excentricidad ni mezcla de géneros que se le resista.
A lo largo de sus 58 ediciones, han pasado por Eurovisión travestis ucranianos, abuelas rusas, transexuales israelíes o el británico Engelbert Humperdinck, que subió al escenario a sus 76 años. Así que cuando el sábado se presenten los 26 países finalistas, entre ellos El sueño de Morfeo, puede ocurrir de todo. Contigo hasta el final, una balada que va subiendo de tono hasta convertirse en festivalera, es la canción con la que España intentará este año superar la marca de Pastora Soler, que en el 2012 quedó en décima posición con su Quédate conmigo. «Esto es un sueño que nunca pensé que viviría, hemos conocido gente encantadora y los estamos disfrutando muchísimo», dijo Raquel del Rosario en su primera rueda de prensa en Malmö.
A juzgar por las casas de apuestas, la favorita de este año es la danesa Emmelie de Forest y su tema Only Teardrops, con el que se clasificó el martes para la final, seguida de Ucrania, Noruega y Rusia. España, junto con Reino Unido, Francia, Italia y Alemania, se clasifica directamente, al igual que el país anfitrión, que venció el año pasado con Euphoria de Loreen.
En una mezcla entre lo viejo y lo nuevo, la gran final del sábado de Eurovisión abrirá las puertas con un himno coescrito por dos antiguos miembros del cuarteto sueco más famoso de la historia: ABBA. Benny Andersson y Bjorn Ulvaeus han colaborado con el DJ Avicii para componer el tema We Write The Story, que según contaron se centra en subrayar «la unidad y el espíritu de comunión».
Mucha expectación ha generado también la participación de la británica Bonnie Tyler (Total Eclipse of the Heart), que cantará el tema Believe in me. A sus 61 años y haciendo gala de una simpática autoironía, esta galesa de inconfundible voz ronca confesaba a la radio Harmony FM que «por suerte, existe el bótox».
Entre los grandes ausentes de esta edición de Eurovisión figuran Bosnia-Herzegovina, Portugal, Turquía y Eslovaquia, que alegaron motivos financieros. Y los organizadores tampoco podrán contar con la presencia del hijo más famoso de Malmö: el futbolista Zlatan Ibrahimovic. La estrella del Paris St. Germain tiene partido, así que sólo podrá participar en la gala con un mensaje de video.