El coronel Dragan Jokic, acusado de crímenes de guerra y contra la humanidad por su papel en la toma de Srebrenica, llegó ayer a la prisión del Tribunal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), en La Haya. Dragan Jokic, cuyo nombre figuraba en una lista secreta de criminales del TPIY, se entregó ayer en una base de la OTAN en Bosnia. El coronel Jokic era uno de los responsables de la logística de la brigada de Zvornik, avanzadilla de la Drina, cuerpo que se apoderó del enclave musulmán de Srebrenica, en Bosnia oriental, en 11 julio de 1995. Más de 7.000 musulmanes murieron en los días que siguieron a la toma de la ciudad por las fuerzas serbobosnias, a las órdenes del general Ratko Mladic. Hasta su rendición, el coronel Jokic mandaba un destacamento de ingenieros perteneciente al quinto cuerpo del Ejército de la Republika Srpska (entidad serbia de Bosnia), con base en Sokolac. Su traslado a La Haya sigue al de otro oficial serbobosnio también acusado de haber participado en las masacres de Srebrenica, Vidosav Blagojevic, ex-co-mandante de la brigada de Bratunac, que fue recluido el pasado viernes en la prisión del Tribunal Internacional en La Haya.