Uno de los principales líderes del movimiento democrático chino, el escritor Liu Xiaobo, fue detenido por «socavar el poder estatal», confirmó ayer en Pekín un abogado amigo del activista, dos días después de su desaparición.
Se cree que en el trasfondo del arresto está la Carta 2008 que el autor y presidente del Pen Club chino firmó para el 60 aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos junto a otros 300 intelectuales, pidiendo más democracia y libertad en China.
Organizaciones de derechos humanos internacionales protestaron por el arresto del ideólogo de la protesta de Tiananmen, en la que murieron entre 400 y 2.000 manifestantes a manos del Ejército chino.
Con la medida, el Gobierno demostró en el aniversario de la declaración la «retórica vacía» de su política de derechos humanos, opinó Human Rights in China. Según la organización con sede en Estados Unidos, la fiscalía lo acusa de «socavar el poder estatal».
Reporteros Sin Fronteras informó de amenazas e interrogatorios también a otros firmantes del documento, y calificó los hechos de «espantosos. Además, señaló que desde principios de mes han sido detenidos varios disidentes chinos que pedían libertad de prensa y opinión. Entre ellos, Zhang Zhuhua, coorganizador de la Carta 2008 , Chen Xi, Shen Youlin y Du Heping.
«Se esperaba que con el 60 aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos, China liberara a algunos disidentes como Hu Jia, pero en lugar de eso se embarca en una ola de detenciones y amenazas», criticó la organización.
Las circunstancias de la detención, el registro de su vivienda y la incautación de su ordenador apuntan a que muy probablemente Liu, ex profesor de Filosofía de la Universidad de Pekín, será sometido a un proceso judicial.
Democracia
La Carta 2008 sigue la línea de la Carta 77 , firmada en 1977 contra las violaciones de los derechos humanos en la entonces Checoslovaquia, y pide el fin de la China unipartidista. En ella se hace un llamamiento a elecciones libres, libertad de expresión y asociación, reparto de poderes, constitucionalidad y a una Justicia independiente.
Entre los firmantes están la ex profesora Ding Zilin, presidenta de las familias de víctimas de la masacre del 4 de junio de 1989; el activista Yao Lifa y la mujer del detenido defensor de los derechos humanos Hu Jia, Zeng Jinyan.