El primer ministro cuenta sólo con 97 de los 230 diputados del Parlamento en su segunda legislatura después de perder la mayoría absoluta que tenía en 2005.
26 oct 2009 . Actualizado a las 16:34 h.El socialista José Sócrates tomó hoy posesión del cargo de primer ministro en el Palacio de Ajuda en Lisboa, y dio comienzo a su segunda legislatura en el cargo después de su victoria en las elecciones legislativas de septiembre.
El acto, en el que además tomaron posesión los 16 ministros del nuevo Ejecutivo, estuvo presidido por el presidente de la República de Portugal, Aníbal Cavaco Silva.
El primer ministro cuenta sólo con 97 de los 230 diputados del Parlamento en su segunda legislatura después de perder la mayoría absoluta que tenía en 2005.
Sócrates afirmó durante su discurso en la toma de posesión que los portugueses escogieron en los comicios generales un Gobierno «reformista» y apostaron por una estrategia de «modernización para el país».
«La toma de posesión de este décimo octavo Gobierno Constitucional de Portugal cumple la clara voluntad manifestada por los votos de los portugueses (...) que tiene una conclusión indiscutible: es un voto de confianza a un Gobierno reformista y a una estrategia de modernización», manifestó Sócrates.
El líder socialista destacó que el resultado electoral mostró una «importante lección política» de que «es posible hacer reformas y promover cambios contando con el reconocimiento de los ciudadanos».
Por su parte, el presidente de la República garantizó la «cooperación» con el nuevo Gobierno y se ofreció como «referencial de estabilidad».
«No me alejaré ni un milímetro del compromiso que adquirí con los portugueses, por eso este Gobierno puede contar con la cooperación del Presidente de la República», declaró Cavaco Silva.
El jefe del Estado aseguró que conoce «las dificultades que tiene que enfrentar un Gobierno minoritario», en referencia al Ejecutivo que el mismo lideró en esta situación en la década de los ochenta y consideró que la minoría en el Parlamento «no es por sí sola un elemento perturbador para gobernar».
Cavaco Silva también hizo referencia a «la complejidad actual de la situación política» y solicitó al Ejecutivo «sentido de la responsabilidad y lealtad institucional».