La nobel Suu Kyi pide unidad a sus seguidores tras su esperada liberación
INTERNACIONAL
El símbolo de la lucha por la democracia en Birmania, Aung San Suu Kyi, fue liberada ayer por la Junta Militar después de pasar gran parte de los últimos 21 años bajo arresto domiciliario. Las primeras palabras de la premio Nobel de la Paz fueron para reclamar a sus miles de seguidores trabajar unidos por el futuro del país.
Sobre las 17.00 horas (12.30 en España), responsables de la Junta entraron en su casa, en la calle de la Universidad, para leer la orden de liberación en el mismo día en que expiraba su última condena a 18 meses de arresto domiciliario. Suu Kyi, de 65 años, saludó a sus seguidores asomándose a la verja que rodea su casa. «¡Qué bonito verlos a todos!», exclamó sonriente. Un seguidor se encaramó para entregarle en mano un pequeño ramo de flores de jazmín como los que Suu Kyi solía lucir en el pelo en sus apariciones públicas, y ella lo cogió y se lo puso radiante de felicidad.
«¡Larga vida a Suu Kyi!», proclamaron por su parte los partidarios de la Nobel. «Tenemos que trabajar unidos para conseguir nuestros objetivos», reclamó Suu Kyi, ataviada con una blusa lila y flores en el cabello.
La disidente hablará hoy en la sede de su partido, el recientemente disuelto NLD, que no pudo participar en las elecciones parlamentarias del pasado fin de semana.
Líderes políticos de todo el mundo saludaron la puesta en libertad de Suu Kyi y reclamaron además la liberación del resto de opositores al régimen militar de Birmania que aún permanecen arrestados o encarcelados.
«Estados Unidos se alegrará el día en el que todas las personas en Birmania están libres del miedo y la persecución», dijo el presidente norteamericano, Barack Obama, para quien Suu Kyi es «una héroe y una fuente de inspiración para todos los que luchan por los derechos humanos». Las cifras habla de más de 2.000 presos políticos en el país asiático.
La misma exigencia hicieron también las Naciones Unidas y la Unión Europea. Sin la «participación libre» de todos los ciudadanos en la vida política no puede haber «democracia y una reconciliación nacional», aseguró por su parte el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en Nueva York.
El Comité noruego de los Premios Nobel invitó asimismo a Suu Kyi a dar el discurso de recepción del Nobel de la Paz que no pudo ofrecer cuando este le fue concedido hace 19 años. El presidente del Comité Nobel noruego, Thorbjørn Jagland, dijo que intentarán ahora conseguir garantías de que Suu Kyi podrá volver a Birmania si decide visitar Oslo.