Participará hoy en la manifestación del viernes de la ira y la libertad
28 ene 2011 . Actualizado a las 06:00 h.El premio Nobel de la Paz y activista opositor Mohamed el Baradei llegó ayer a El Cairo para sumarse a las protestas contra el presidente Hosni Mubarak, que en los últimos tres días se han saldado con siete muertos, decenas de heridos y centenares de detenidos. A su llegada al aeropuerto de El Cairo, el político manifestó a la prensa que el cambio en Egipto es inevitable. El país se dirige «hacia un proceso de cambio pacífico», añadió.
El Baradei, que había seguido desde el extranjero la revuelta y ha sido criticado por sus continuas ausencias del país, vuelve con la intención de dirigir la transición en el país en caso de que Mubarak abandone el poder. «La gente se ha dado cuenta de que el régimen no está escuchando nada y han tenido que salir a la calle. Voy a continuar dando apoyo a la gente», añadió.
El gobernante Partido Nacional Democrático instó a la calma y aseguró que respalda las exigencias del pueblo y cree en «la promoción de las libertades públicas y la ampliación de la participación política». Mientras, el presiente no ha hecho comentarios ni ha aparecido en público en los últimos días.
Las manifestaciones en contra del régimen de Mubarak, en el poder desde 1981, se intensificaron ayer en las ciudades de Suez e Ismailía. Grupos de manifestantes quemaron una comisaría en Suez y se enfrentaron a la policía en unos disturbios que dejaron un saldo de al menos diez heridos. Unos choques similares se produjeron en Ismailía, al borde del canal de Suez, cuando jóvenes de grupos opositores, entre ellos el Movimiento 6 de Abril, intentaron acercarse a la sede del Gobierno regional. Este grupo, uno de los promotores de las protestas, dijo en un comunicado que los egipcios están «a pocos pasos del sueño de la libertad» y que no tienen «miedo a nadie». «El cambio llega, no hay retroceso ni rendición», agregó.
En El Cairo y Alejandría la jornada fue tranquila, aunque hubo concentraciones. Hoy, festivo en el país, se espera un día complicado con la convocatoria del viernes de la ira y la libertad.
Las autoridades están poniendo en libertad a decenas de detenidos, entre ellos varios periodistas, aunque otros responderán ante la justicia.
A los disturbios se unió ayer la caída de la Bolsa de Egipto, que se desplomó, a pesar de que durante la jornada hubo una interrupción de 30 minutos por las fuertes bajadas. Además, la libra egipcia perdió valor frente al dólar.
Hasta el fútbol se ha visto afectado por las protestas y se han suspendido los partidos de liga de hoy y mañana por motivos de seguridad.