El actual jefe del Gobierno, Enrico Letta, considera que la era política del ex primer ministro italiano ha llegado a su fin
06 oct 2013 . Actualizado a las 20:48 h.El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi quiere cumplir su condena por fraude fiscal realizando trabajos sociales, informaron hoy medios italianos citando al abogado del ex jefe de gobierno, Franco Coppi.
Si no hay cambios, la solicitud de Berlusconi para realizar trabajos sociales se presentará la próxima semana, indicó el abogado.
Para el actual jefe de gobierno, Enrico Letta, el fin político de Berlusconi ha llegado. «Toca a su fin una era política que ha durado 20 años», dijo en declaraciones al canal de televisión Sky Tg24.
«Berlusconi ha intentado derribar el gobierno y no lo ha conseguido porque el Parlamento en consonancia con el país, quiere que siga trabajando».
«Se ha pasado página de forma definitiva», dijo Letta. «Tengo respeto por las preocupaciones del PdL (el partido conservador de Berlusconi), pero Alfano ha impuesto un liderazgo fuerte y determinante: ha aceptado desafíos y ha ganado».
El ministro del Interior, Angelino Alfano, retiro el apoyo a Berlusconi, el líder de su partido, y con ello abrió las puertas a la derrota en el Parlamento al tres veces primer ministro y empresario multimillonario.
La Comisión de Inmunidad del Senado había recomendado el viernes la expulsión de Berlusconi de la Cámara, ya que la ley italiana establece que los parlamentarios condenados en firme tienen que renunciar a su mandato. Berlusconi calificó esta decisión de un ataque «al corazón de la democracia». «Esta decisión indigna no fue el resultado de la aplicación correcta de la ley, sino la voluntad de eliminar por la vía jurídica a un adversario político, al que no se le puede ganar en las urnas y por medios democráticos», dijo Berlusconi.
Por su parte, el líder del grupo parlamentario del partido Pueblo de la Libertad. En el Senado, Renato Schiafani, aseguró que Berlusconi, «sigue siendo» a pesar de todo «el líder indiscutible de la centro derecha».
Alfano subrayó: «Berlusconi representa a más de diez millones de italianos. Confiamos en que el Senado asegure su representación curando esta herida a la democracia». Además calificó la decisión del comité como «una obstinación, que no tienen nada que ver con la justicia».
Después de ser condenado en agosto en un juicio por fraude fiscal, Berlusconi intentó hacer caer el gobierno de Letta para impedir que su carrera política como parlamentario llegara a su fin. Finalmente renunció a la tentativa.
Se cree que la decisión definitiva del Parlamento italiano sobre la expulsión de Berlusconi no se producirá hasta mediados de octubre.