Los jueces ordenan investigar si Berlusconi sobornó a las chicas del «bunga-bunga» para que testificaran a su favor
30 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Con la retirada del apoyo de Forza Italia, el presidente Giorgio Napolitano ha pedido al jefe del Gobierno, Enrico Letta, que someta su Ejecutivo a una moción de confianza en el Parlamento. Se trata de saber con certeza con qué apoyos cuenta ahora que los seguidores de Silvio Berlusconi se han dividido entre quienes apoyan la vuelta al viejo Forza Italia y quienes prefieren seguir al vicepresidente y su exdelfín Angelino Alfano en su nueva aventura de centroderecha.
Desde la cumbre de Vilna, Letta explicó que la moción será «un refuerzo» de su Gobierno y le permitirá «pasar de un 2013 en el que hemos conseguido resultados importantes jugando a la defensiva, bajo asedio, a un 2014 en que podremos jugar al ataque». Además confía en «certificar los números que ya en el Senado quedaron de manifiesto con los 171 votos a favor de la ley de presupuestos».
Aunque se pensaba en la próxima semana como fecha de la votación, Letta aclaró que esta no será antes de las primarias que el 8 de diciembre celebrará el Partido Democrático. La fecha podría ser el próximo 18, aunque la decisión se tomará en la reunión que el lunes mantendrá con Napolitano.
La propuesta de la moción de confianza surge como respuesta a la reunión que Napolitano mantuvo el jueves con una delegación de parlamentarios de Forza Italia tras la decisión del Senado de expulsar a Silvio Berlusconi por su condena a cuatro años por fraude fiscal.
Il Cavaliere podría ver ampliados sus problemas con la Justicia, ya que se va a investigar si pagó a las chicas que participan en sus fiestas bunga-bunga para que testificaran a su favor. Así lo indican los jueves de Milán en la motivación de su sentencia contra tres condenados por prostitución en el segundo proceso por el llamado caso Ruby: el periodista Emilio Fede, la parlamentaria regional Nicole Minetti y al representante artístico Lele Mora.
Para el tribunal, «el pago mensual y regular de sumas de dinero» a la jóvenes que acudían a las fiestas de Berlusconi y que fueron testigos en el tribunal es «una manipulación de las pruebas», lo que constituiría un posible delito de soborno de testigos. Además los jueces han enviado a la Fiscalía la documentación necesaria para que evalúe si la propia Ruby también puede ser acusada de ese delito.