El testigo clave del Watergate acusa a Trump de actuar como Nixon
INTERNACIONAL
John Dean comparece en el Congreso para reforzar los intentos de procesar al presidente por obstrucción a la justicia
11 jun 2019 . Actualizado a las 15:22 h.El testigo clave del caso Watergate, cuyo testimonio llevó a la dimisión al presidente Richard Nixon, John Dean, volvió el lunes al Congreso de Estados Unidos a enfrentarse con una nueva cita con la historia. Su misión fue esta vez alertar a los estadounidenses de las similitudes entre lo sucedido en los años 70 con los intentos de Donald Trump de obstruir la investigación de la injerencia rusa en las elecciones presidenciales del 2016.
«La Administración Trump está compitiendo a marchas forzadas con lo que hizo la de Nixon», afirmó en la primera audiencia celebrada por el Comité Judicial del Congreso tras la publicación el pasado 18 de abril del informe del fiscal especial Robert Mueller. Un documento que calificó como «el mapa de las evidencias» contra el inquilino de la Casa Blanca.
Durante cuatro horas, el ex abogado de Nixon declaró junto a tres experimentados exfiscales encargados de aportar la visión técnico-jurídica del caso. Ninguno de ellos fue testigo directo de los hechos. Su papel fue el de aportar contexto en un esfuerzo de los demócratas por mantener vivos los hallazgos de la investigación de Mueller para calentar el debate sobre la posible apertura de un proceso de destitución contra Trump. La primera semilla del todavía lejano impeachment.
Solo el 3 % de los estadounidenses afirman haber leído el informe de 448 páginas redactado por el fiscal especial. Y solo el 41 % de los ciudadanos se muestran a favor de abrir un juicio político contra el inquilino de la Casa Blanca, según una encuesta realizada por la CNN.
Mientras Dean se encargó de insistir en que la historia «se está repitiendo», los fiscales tiraron a matar. «Por los mismo hechos, cualquier persona estaría ahora acusada de múltiples delitos de obstrucción a la justicia», dijo la exfiscal de Alabama Joyce Vance, que recordó que el informe detalla 10 episodios de este presunto delito.
Los demócratas favorables a abrir el impeachment carecen todavía de un testigo directo de los presuntos delitos de Trump. Una figura equivalente a Dean en el caso Watergate. Por este motivo, insistieron en preguntar por el papel jugado por exconsejero de Trump Don McGahn, al que el presidente pidió en junio del 2017 que estudiara la forma de despedir a Mueller. El asesor se negó y abandonó la Casa Blanca cuatro meses después.
«McGahn sabía que despedir al fiscal era provocar una masacre del sábado noche», contestó Dean, en un paralelismo con la madrugada del 20 de octubre de 1973 cuando Nixon fulminó al fiscal especial del Watergate Archibald Cox. El exasesor de Trump es el testigo más citado en el informe. Sin embargo, el pasado mes de mayo se negó a declarar ante el Comité Judicial.
Los republicanos insistieron en desacreditar a Dean, a quien acusaron de montar un negocio mediático con sus opiniones contra el presidente. Trump, por su parte, le llamó «perdedor» y recordó que a diferencia de Nixon, él no dimitirá. «Es un honor formar parte de su lista de enemigos», contestó Dean.