Colombia acusa a Maduro de dar cobijo a los disidentes de las FARC

Héctor Estepa BOGOTÁ / E. LAVOZ

INTERNACIONAL

«FARC-EP presente» mensaje escrito en la pared de un taller mecánico, en la carretera entre El Palo y Toribio, donde unos guardias indígenas fueron asesinados por disidentes de las FARC
«FARC-EP presente» mensaje escrito en la pared de un taller mecánico, en la carretera entre El Palo y Toribio, donde unos guardias indígenas fueron asesinados por disidentes de las FARC FEDERICO RIOS | Reuters

Caracas niega cualquier relación con la guerrilla pese a que invitó a Márquez y le ayudó a viajar a Cuba

31 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Nueva colisión entre Colombia y Venezuela, esta vez con los disidentes de las FARC como protagonistas. El presidente del país cafetero, Iván Duque, ha acusado al Gobierno de Nicolás Maduro de estar dando cobijo a los cuatro excomandantes de la guerrilla colombiana que el jueves anunciaron su vuelta a las armas.

«Los colombianos debemos tener claridad de que no estamos ante el nacimiento de una nueva guerrilla, sino frente a las amenazas criminales de una banda de narcoterroristas que cuenta con el albergue y el apoyo de la dictadura de Nicolás Maduro», señaló Duque. Fuentes de inteligencia militar llevan meses advirtiendo de la presencia en tierras venezolanas de Iván Márquez, aparente líder de los disidentes.

«No tenemos duda de que el vídeo difundido esta madrugada fue grabado en Venezuela», señaló una fuente de inteligencia al diario El Tiempo, refiriéndose a la grabación en la que Márquez hizo pública su vuelta a la insurgencia, rodeado por otros tres importantes excomandantes y una decena de hombres armados.

Miguel Ceballos, alto comisionado colombiano para la paz, llegó a confirmar, en una entrevista en ese mismo diario, que tanto Márquez como Jesús Santrich, huido de la Justicia tras ser acusado de narcotráfico, viajaron recientemente a Cuba, desde Venezuela, con la presunta ayuda del Gobierno de Maduro.

Caracas ha negado todas las informaciones. Los altos funcionarios chavistas dicen no tener relación alguna con las FARC. «Resulta insólito que Iván Duque, con absoluta desfachatez, en un acto deleznable, pretenda desplazar hacia terceros países y terceras personas su exclusiva responsabilidad en el planificado desmontaje del proceso de paz», señaló el ministro de Exteriores venezolano, Jorge Arreaza.

Los analistas colombianos recordaron, en cualquier caso, que fue Nicolás Maduro quien invitó a Márquez a Venezuela, durante la reciente celebración del izquierdista Foro de São Paulo. La confirmación de dicha información podría suponer un incremento de la presión internacional hacia el Gobierno chavista.

Alianzas con el ELN

A las autoridades de Bogotá les preocupa especialmente la intención de Márquez de crear sinergias con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), la mayor guerrilla desde la desmovilización de las FARC, y que, según las Fuerzas Militares de Colombia, contaría con al menos 1.000 miembros en Venezuela, incluida su jefatura.

Inteligencia militar ha filtrado a la prensa que Márquez se habría reunido en abril con Pablito, jefe militar del ELN. El encuentro habría tenido lugar en Venezuela.

Las disidencias de las FARC podrían contar con unos 1.800 hombres armados, divididos en 23 grupos a lo largo del extenso territorio colombiano. Sin embargo, los expertos creen que muchas de esas unidades no se han unificado bajo un mismo mando y que no estarían, por ahora, coordinadas entre sí. Algunos expertos creen que la decisión de Márquez de aliarse con el ELN denotan una falta de fuerza militar en sus filas.

El Gobierno colombiano ha clasificado al grupo dirigido por Márquez como un grupo armado residual -no le da el rango de guerrilla- autorizando al Ejército a bombardear sus posiciones. El viernes murieron al menos nueve integrantes de uno de los grupos disidentes de las FARC en la región de Caquetá, durante un operativo militar.